Nutrición: cinco alimentos con microbiótica que protege contra el coronavirus

A medida que pasa el tiempo, los investigadores empiezan a estudiar el coronavirus y detectan algunos fármacos, alimentos y algunas proteínas que podrían frenar los efectos del virus. La microbiota es una aliada perfecta contra la Covid. La composición del microbioma, la comunidad de bacterias que reside en el tracto gastrointestinal de los seres humanos, está estrechamente vinculada al funcionamiento del sistema inmune. Por extensión, a la prevención de enfermedades. Según un estudio, la microbiota sana puede protegernos contra la infección producida por la Covid.

Para producirla es importante llevar a cabo una alimentación sana y equilibrada. Aquí os mostramos cinco alimentos que la producen. Las carnes son importantes, especialmente las magras, como las de aves o conejos, se pueden tomar con más frecuencia, unas tres veces por semana, sin embargo hay que evitar freírla o rebozarla.

Los alimentos que benefician a su producción

Muy importante el aceite de oliva virgen extra, el oro líquido producido en España. Es el mejor aliado para nuestras recetas. Tampoco deben faltar los frutos secos o las semillas. El aguacate también es muy importante ya que contiene Omega-3, como el pescado azul.

Los prebióticos se pueden definir, como explicaba Elena de la Fuente, nutricionista del Hospital Quirónsalud San José (Madrid), como "microorganismos vivos que permanecen activos en el intestino en una cantidad suficiente como para crear la microbiota intestinal y tener un efecto beneficioso en nuestro sistema inmune que nos va a proteger frente a enfermedades”. Estos se pueden encontrar en los productos fermentados como el yogur, el kéfir o el chucrut, ayudan a equilibrar la microbiótica.

Para todo y también para la microbiótica es fundamental alimentarse con frutas y verduras. Los alimentos de origen vegetal son los que más nutrientes aportan a nuestro organismo. Por eso, la regla de comer “5 piezas de frutas y verduras al día”. Aportan fibra alimentaria, una carencia en muchas dietas y que sirve de combustible para la microbiótica.

Tampoco podían faltar, por tanto, las legumbres y los cereales integrales. Otra fuente fundamental de proteína vegetal y fibra alimentaria. Es muy importante tomarlas con regularidad. Y se debe incluir la cebada y la avena.

Y especialmente importante, por último, eliminar el alcohol y el tabaco. Perjudiciales para la microbiótica pero también para nuestra salud.