Ferrari no escatima esfuerzos para seguir mejorando su monoplaza
El campeonato del mundo de Fórmula 1 calienta motores para la disputa de su octava prueba, este fin de semana en el Red Bull Ring, de Austria. Un circuito completamente nuevo desde el punto de vista técnico y que regresa a la competición después de más de diez años.
Con apenas ocho o nueve curvas (la cuenta varía en función de lo que se entienda por curva) y 4.326 metros de longitud, el Red Bull Ring es el tercer circuito más corto del Mundial, sólo por detrás de Mónaco e Interlagos, y en el que menor tiempo necesitan los pilotos para completar una vuelta.
Ferrari lleva tiempo trabajando en el simulador para que la adaptación de sus pilotos a esta nueva pista sea lo más sencilla posible, y tiene claro que el desgaste de los neumáticos puede ser fundamental. "Tendremos los Pirelli blandos y superblandos, como en las dos carreras anteriores", asegura James Allison, director técnico de la Scuderia.
"No estamos en condiciones de decir exactamente qué esperamos de esta carrera, pero como en cada pista durante esta temporada, la gestión de los neumáticos blandos en la clasificación será de suma importancia. Hay que estar seguro de tener neumáticos listos para una vuelta de clasificación en la Q2, pero también tener claro que puedan rodar sin demasiados problemas la primera parte de la carrera", añade.
Allison, además, no duda en destacar los esfuerzos que está realizando Ferrari para acelerar el desarrollo del F14-T: "Cada temporada se caracteriza por los trabajos que se realizan en la fábrica para mejorar el coche. Si estás al frente, trabajas para mantenerte ahí, si no, lo haces para ganar posiciones en la parrilla. En este momento estamos haciendo todo lo posible para mejorar el coche en todos los aspectos, desde la mecánica a la aerodinámica, la electrónica, el comportamiento...".
"Haremos cualquier cosa que podamos para mejorar. En las últimas carreras hemos llevado actualizaciones, y aunque sólo sea en parte, se ha mejorado la competitividad de nuestro coche. Por tanto, tenemos que seguir en esa lucha. Tenemos mejoras que vendrán en las próximas carreras. Si hacemos un buen trabajo con estas nuevas piezas, comenzaremos a ver los frutos y se verá un Ferrari mejor frente a nuestros rivales. No es una batalla fácil, porque nunca termina", concluye Allison.
