Un canterano del Valencia que echa de menos la paella
David Lombán no olvida la que ha sido su segunda casa. El asturiano que echó raíces en Valencia, al que llegó todavía en edad juvenil. El central, que actualmente se encuentra en el Málaga, donde ha realizado el confinamiento y está a la espera de regresar a la competición.
En un entrevista para los medios del club malacitano, Lombán reconoce que echa de menos a la familia, a la que tiene lejos. Pero ha desarrollado un 'hobbie' en todo este tiempo confinado: la paella. "Es una de mis comidas favoritas y estoy intentando hacer una buena paella para no echarla de menos".
El canterano che no tuvo suerte en su etapa en Valencia. En 2006, Quique Sánchez Flores lo llamó para hacer la pretemporada en Holanda con el primer equipo pero, durante una de las sesiones de entrenamiento de la concentración, sufrió una grave lesión en el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda.
Tras seis meses de recuperación, se ganó la titularidad en el filial y el técnico Ronald Koeman lo hizo debutar en LaLiga Santander ante el FC Barcelona en 2007. Pero en la temporada siguiente, en un encuentro del Mestalla, una nueva lesión de ligamentos, esta vez en la rodilla derecha, lo volvió a apartar de los terrenos de juego otros seis meses y truncó su carrera en el conjunto che.
Una trayectoria de altibajos
Sin olvidar la tierra ni la comida, el central ha tenido una trayectoria llena de altibajos. Después de superar las dos lesiones de rodilla, pasó por Salamanca, Xerez, filial del Barça, Elche, Granada, Éibar y fichar en 2018 por el Málaga, donde se mantiene actualmente.
Lombán explica lo que más ha echado de menos durante el confinamiento: "la posibilidad de ver a mi familia, ver a mi hermano, a mis amigos… Que ellos pudieran venir o yo ir. Aunque estando lejos de casa es complicado".
