Mateo Alemany: "Dentro del campo era insoportable"

El nuevo director general del Valencia CF, Mateo Alemany, es un enamorado de su trabajo. Nadie descubre nada si se dice que él es mallorquinista, club del que es socio y pequeño accionista, pero se va a dejar todo por hacer del Valencia de nuevo un club grande. Su mano en el día a día ya se nota porque después de muchos años se vuelve a respirar fútbol en las oficinas del club ché.

Mateo Alemany se crió de pequeño en el pueblo de sus abuelos, en Andratx, un enamorado del mar y del Puerto de Andratx, pero también de la Sierra de Tramuntana. Sólo se le tuerce el gesto cuando se habla de la masificación de la isla."Es un sitio muy recomendable. En mi niñez era un sitio maravilloso. El mar siempre ha sido un referente para mi. Me encanta. Tengo una pequeña lanchita a medias con mi hermano, me gusta navegar pero no he podido hacerlo todo lo que me hubiera gustado. Mi prioridad siempre fue el fútbol". Su relación en el mar le viene de cuna porque en su familia hay muchos capitanes de la Marina Mercante, entre los que está su padre. Su madre fue profesora en el colegio Sagrados Corazones. 
"El Puerto de Andratx es un sitio recomendable. En mi niñez era un sitio maravilloso. El mar siempre ha sido un referente para mi. Me encanta. Tengo una pequeña lancha a medias con mi hermano, me gusta navegar pero no he podido hacerlo todo lo que me hubiera gustado"
Conoció personalmente a uno de los mejores escritores que ha dado Mallorca, Baltasar Porcel, íntimo amigo de su padre, se criaron juntos de niños y hasta el fin de sus días era habitual verle por casa de los Alemany. "Baltasar Porcer fue amigo íntimo de mi padre. Son amigos de la infancia. Lo conocí y era una persona entrañable. Su literatura está anclada en la Mallorca pescadora y describe toda la tierra en la que me crié".
Su pasión por el fútbol le viene de su época de futbolista. Jugó en Tercera División, pero sobre todo lo hizo en División de Honor en Fútbol Sala. Él define su fútbol como poco técnico, pero en cambio se entregó al 100% siempre tanto en los entrenamientos como en los partidos. "Era malo. Sólo llegué a Tercera División. Mis condiciones técnicas eran flojitas. Pero sobre todo era insoportable dentro del campo. No cascaba mucho, pero quería ganar siempre, soy súper competitivo. Fui un jugador muy intenso. Pero reitero si de algo estoy orgulloso es que lo daba todo".
"Como futbolista era malo. Sólo llegué a Tercera División. Mis condiciones técnicas eran flojitas y dentro del campo era insoportable. No 'cascaba' mucho, pero quería ganar siempre, soy súper competitivo. Fui un jugador muy intenso. Pero si de algo estoy orgulloso es que siempre lo daba todo"
Alemany es abogado pero nunca ejerció como tal, ya que sus derroteros fueron por el fútbol. Su primera gran oferta de trabajo llegó por un anuncio en el periódico y fue para trabajar en el club de su vida, en el Mallorca. Donde jugó en categorías inferiores y luego lo llevaría a sus cotas más altas com presidente. "Mi pasión al fútbol nace de cuando mi padre y mi abuelo me llevaban al Lluis Sitjar. Jugué hasta 36 años, pero ya a los 25 años entré en el club para ayudar en la gerencia. Era una empresa de consulting. Hicieron una preselección y me quedé yo. Estuve unos años en los que combiné el trabajo con el fútbol, acabé la carrera y apareció la oportunidad de entrar en el club. No tuve tiempo de ejercer de abogado, me atraía el Derecho Mercantil".
Es de las pocas personas que le han dicho que 'No' a Florentino Pérez y al Real Madrid. Aunque él siempre dice que fue más un 'Sí' al Mallorca. "No hay muchos profesionales que le hayan dicho que no a Florentino, pero el Mallorca no andaba bien y tenía que quedarme". Su andadura en el fútbol también le llevó a presentarse a la presidencia de la RFEF, ya que "buscaba un cambio de gestión", pero no logró vencer al Ángel María Villar. 
"Hace dos meses que no cojo un palo y ahora debo ser horroroso, pero cuando jugaba al Golf llegué a tener 9’8 de handicap. Me gusta practicarlo. He jugado varias veces con Rafa Nadal y vi el Master de Augusta que ganó Sergio García. Fue espectacular"
Además, del mar, el golf es otro de los hobbies que tiene. "Hace dos meses que no cojo un palo y ahora debo ser horroroso, pero cuando jugaba llegué a tener 9’8 de handicap". Una pasión que comparte con el director deportivo, José Ramon Alesanco, pero a él le gusta jugar con un buen amigo como Rafa Nadal o su tío Miguel Ángel Nadal. Devora por televisión cualquier tipo de deporte que hagan, pero siempre con un balón de por medio: el fútbol, el gol, el baloncesto y el tenis, le gustan. Por cierto vió ganar el Open de Augusta al castellonense Sergio García.
Aunque la situación de finales de 2008 y principios del 2009 del Mallorca no es extrapolable a la del Valencia CF. Pero está aplicando el mismo método que entonces, el de la autoexigencia consigo mismo y el del trabajo constante y poco a poco con el objetivo de buscar resultados desde el principio. "Yo sé como soy y sé cómo considero que debe trabajar un profesional del fútbol".
"Soy mallorquinista y eso no lo puedo cambiar. Pero en el momento en que me involucro en este proyecto, vengo por ilusión, es un reto. Me gusta competir. Vivo la competición de manera especial y los partidos de forma intensa en Mestalla. Es difícil que alguien trabaje en el fútbol y que triunfe en el fútbol sin pasión".
Las voces críticas antes de su llegada decían que no sentía el hierro del valencianismo, pero él es muy claro al respecto: "Soy mallorquinista y eso no lo puedo cambiar. Pero en el momento en que me involucro en un proyecto, vengo por ilusión y porque es un reto. Me gusta competir y vivo la competición de una manera muy especial. Estoy viviendo los partidos de forma muy intensa en el palco. Es difícil que alguien trabaje en el fútbol sin que haya un componente emocional y de pasión. Es difícil triunfar en el fútbol sin pasión". En el mundo del fútbol ha hecho amigos, pero también los ha perdido: "Cada uno es como es y cada uno ve las cosas a su manera. Se generan situaciones de crispación por diferencias de criterios. No he tenido problemas con nadie, sólo diferencias de criterio". 
Pero si de algo está muy orgulloso es de poder haber tenido como referentes por diferentes motivos a tres de los más grandes de los que han disfrutado el fútbol español. "Me ha influido mucha gente y no debemos dejar de aprender hasta el final, pero me quedo con tres: Luis Aragonés, Johan Cruyff y Alfredo Di Stéfano. Me impactaron porque rompían los moldes de lo que se habla en el fútbol. Genios e innovadores".