Un empate insulso en el Coliseum

El Valencia CF sumó un punto en Getafe que le sirve única y exclusivamente para certificar su permanencia en Primera de forma matemática. Los de Pako Ayestarán, en un partido flojo, se adelantaron gracias a un lanzamiento magistral de falta de Dani Parejo, se dejaron remontar y, en las postrimerías del choque, una acción de calidad de Álvaro Negredo, permitió a Paco Alcácer establecer el 2-2 definitivo.  

Un aislado cabezazo de Paco Alcácer en el primer minuto fue lo más destacado de la primera media hora de juego. Por parte getafense, ni eso, nada de nada.
El Valencia salió desde el principio dominando, dispuesto a imponer su calidad. Centrales abiertos, sacando el balón jugándolo y esperando cualquier ocasión para utilizar su calidad y montar alguna contra letal. 
El control del juego, sin embargo, propició unos primeros minutos sosos, aburridos, plagados de imprecisiones en los pases y en los que las defensas se imponían siempre a los ataques.  
Un aislado cabezazo de Paco Alcácer en el primer minuto fue lo más destacado de la primera media hora de juego. Por parte getafense, ni eso, nada de nada.
El problema del Valencia es que, pese a dominar, no estaba fino en ataque. Rodrigo, especialmente destacado ante el Éibar, no acertó ninguno de los balones que le llegaban. En la otra banda, André Gomes, tampoco tenía el mejor de sus días.
Así, el Valencia fue dominando y avanzando metros, por lo que el equipo que montó las contras era el Getafe. En el 31, en una salida aislada de los azulones, Pedro León estrellaba el balón en el larguero.     
La acción cambió el partido. El Valencia empezó a acumular pérdidas en la medular y el Getafe se creció. En los últimos minutos de la primera entrega mereció marcar el equipo local. Álvaro Vázquez se quedaba sólo ante Alves tras un balón que no debió dejar escapar Siqueira. El punta se aprovechaba de un pésimo cruce de Abdennour y fusilaba al meta brasileño del Valencia, que realizaba el primer milagro de la tarde. El posterior rechace, que le caía también a Vázquez, dejó en evidencia al punta pues, a puerta vacía, tiró el balón al lateral de la red. Perdonaba el Getafe, que se jugaba la vida. 

Pako Ayestarán deshace los cambios 

Con estas dudas se llegó al tiempo de descanso. El Valencia había dominado pero estaba sufriendo y por eso Pako Ayestarán deshizo los cambios que había operado en el once inicial respecto al duelo contra el Éibar. Así, saltaron en el descanso Cancelo por Barragán y Santi Mina por Enzo Pérez. El planteamiento era mucho más ofensivo, los laterales más arriba y el objetivo buscar al rival en su área.
Así, a las primeras de cambio, la suerte sonrió a Pako Ayestarán y a su equipo. En la primera pared de Rodrigo cortada en falta por la zaga azulona, Dani Parejo se sacó un lanzamiento milimétrico de falta que supuso el 0-1.
El gol generó ansiedad en las filas locales que se lanzaron en tromba a por el empate. Pudo conseguirlo en el 55, porque Pedro León, sólo ante Alves la tiró fuera, pero instantes después Medrán sí que acertaría a rematar un rechace mal despejado por la zaga valencianista. El balón quedaba suelto en el área grande y Medrán, por bajo, batía de forma extraña a Alves, a quien pudo molestarle un rival en posible fuera de juego. Quedaba media hora y el empate que campaba en el electrónico no servía ni a unos ni a otros.
 

El fallo de Abdennour

En todo caso, si el empate cayó como un jarro de agua fría, el segundo tanto, obra de Scepovic fue un mazazo. Aymen Abdennour, con ventaja, se equivocaba a la hora de despejar un pase largo y el punta getafense le robaba la cartera. El tunecino quedaba retratado y Scepovic corría treinta metros hasta encarar a Alves y batirlo.
La última decisión de Ayestarán para enmendar la plana fue sacar a Negredo por Regredo. 4-4-2 claro en pos de un triunfo que le permitiera seguir escalando posiciones en la tabla.
Sin embargo, y aunque el sistema defensivo no funcionaba, el Valencia tenía pólvora en su ataque. Así, Negredo llevó un magnífico contraataque, atrajo hacia sí a cuatro defensas y, cuando estaba rodeado, le cedió una asistencia magnífica a Paco Alcácer que empaló el balón al fondo de las redes.
Aún tuvieron ambos equipos su oportunidad para desnivelar la igualada. El Valencia, gracias a un lanzamiento lejano de André Gomes, que fue despejado por Guaita con una espectacular y estética estirada, y el Getafe que se encontraba con un Alves inconmensurable en la última jugada del encuentro.