Los ultras del Spartak de Moscú dejan su tarjeta de visita en Maribor

El Sevilla FC ha pasado ya el partido a priori más complicado en lo deportivo del Grupo E de la Liga de Campeones, pero aún están por llegar otros encuentros que marcarán el futuro del equipo en la máxima competición continental.

En materia de seguridad, el que más preocupa a las autoridades de la ciudad es el de la jornada 4 ante el Spartak de Moscú, que se jugará el 1 de noviembre en el Ramón Sánchez-Pizjuán.
Los ultras rusos se están convirtiendo en un gran problema en cada uno de sus desplazamientos, ya sea con la selección nacional o con sus equipos, y este miércoles los del Spartak ya dejaron su tarjeta de presentación en la visita al Maribor Branik, con multitud de incidentes.
Primero hubo enfrentamientos en las calles de la ciudad eslovena, en el que los rusos se mostraron especialmente violentos peleando con la policía. Posteriormente, en el estadio, encendieron numerosas bengalas e incluso una fue disparada desde la grada hasta el centro del campo, pasando muy cerca del colegiado del encuentro, que amenazó incluso con suspenderlo.
La UEFA suele ser inflexible en estos casos y no se descarta una sanción ejemplar. Ya en la pasada edición, los aficionados del Legia de Varsovia fueron duramente castigados por incidentes similares.