La loca celebración de Sampaoli camino al vestuario

El Sevilla FC ha vuelto a demostrar su hegemonía en el derbi sevillano en un encuentro que acabó remontando ante el Real Betis. Tras una primera parte de bajo rendimiento en la que Riza Durmisi adelantó a los verdiblancos, los cambios realizados en el descanso voltearon el nivel a favor de los nervionenses. La salida al campo del capitán Vicente Iborra desequilibró las aspiraciones del conjunto local en la segunda confrontación de la temporada. Tanto el de Moncada como Gabriel Mercado dieron la vuelta al partido para deleite del banquillo sevillista. Especial celebración derrochó Jorge Sampaoli después de que Del Cerro Grande decretara el final del choque.

El entrenador argentino enfiló rápidamente el túnel de vestuario por detrás de Juanma Lillo. En una muestra de rabia contenida, el de Casilda se abalanzó sobre su segundo entrenador al grito de "la concha de mi madre". Un famoso grito de aliento propio del país sudamericano. Incluso llegó a levantar en peso a su ayudante para más tarde dar golpes en el estrecho pasillo que conduce al vestuario visitante del Estadio Benito Villamarín.
Festejo que demuestra la importancia del partido a pesar de que su valor a efectos prácticos sea de tres puntos. El Sevilla sigue custodiando sus aspiraciones ligueras.