El ejemplo del Sevilla de Caparrós
El Sevilla sigue teniendo difícil alcanzar una plaza de competición europea. Más que por los números, que también, por sus propias deficiencias competitivas fuera del Sánchez Pizjuán. Pero tras la victoria ante el Athletic es posible, e incluso hay un ejemplo en la historia reciente del club nervionense.
El equipo nervionense, actualmente, cuenta con 41 puntos y quedan 24 por disputarse. Está a seis puntos de los puestos europeos (a seis del Málaga y el Betis actualmente), que podrían ser tres si el TAS mantiene la sanción de la UEFA al Málaga y le imposibilita jugar en Europa.
El caso es que, con ocho jornadas por delante, y en situación similar, el Sevilla, en la temporada 2003/04, logró meterse en Europa, con aquel gol a Osasuna en la jornada final de Baptista.
En aquella campaña, con 30 jornadas disputadas, el Sevilla tenía 38 puntos, tres menos que a estas alturas, y estaba a seis de la sexta posición, la que marcaba la frontera con los puestos europeos; también estaba a seis puntos de la séptima plaza. Ganó en la recta final del campeonato al Español (1-0), al Racing (5-2), al Athletic (2-0), al Albacete (1-4), empató con el Celta (0-0), con el Zaragoza (4-4) y perdió con el Valencia (0-2).
Aquel Sevilla de Caparrós se metió en Europa firmando en las últimas jornadas 17 puntos. Acabó sexto clasificado con 55 puntos.
El Sevilla tiene ante sí un reto difícil, sobre todo por su irregular rendimiento, pero posible. Claro que para ello tendría que superar a rivales directos en los partidos en los que se enfrentará a ellos. El primero, el viernes ante el Betis en el derbi. Luego recibirá a la Real y el Valencia y viajará a Málaga, entre otros encuentros.
