Balón parado y eliminatoria andada
Álvaro Ramírez IIIEl Sevilla ha vencido al Español en su estreno en la Copa del Rey y ha logrado una buena renta de dos goles de ventaja para el partido de vuelta. No hizo un partido brillante el equipo nervionense, pero sacó fruto de la estrategia con dos goles en saques de esquina y un penalti en las postrimerías del partido.
El equipo de Míchel no jugó bien, incluso en la segunda mitad perdió el control del partido y se vio superado por el Español, que llegó a igualar el encuentro, por momentos. Pero no está mal que el equipo sevillista aprenda a llevarse puntos y eliminatorias no por su cara bonita, pero sí, por ejemplo, por su estrategia y a balón parado. Así ha logrado el conjunto hispalense marcar diferencias ante el Español. Lo hizo Fazio nada más comenzar el partido, en un buen saque de esquina de Rakitic; lo hizo Cala, qué bien Cala, en otro remate en otro buen córner de Campaña; y remató el partido Negredo de claro penalti cometido a él mismo.
RCD Español: El Español juega con Casilla; Galan, Colotto, Forlin, Capdevilla; Baena, Victor Sánchez, Tejera (Longo, m. 89), Cristian Alfonso (Fonte, m. 75), Simao (Mattioni, m. 86); Stuani.
Esos tres goles aminoran un encuentro irregular del Sevilla, en el que se vio pronto con un gol a favor, en el que perdió algunas de sus habituales virtudes y en el que estrenó una variación del sistema para darle sitio a Reyes. Realmente, el utrerano no está para que un equipo, y menos el Sevilla, modifique su dibujo para encontrarle sitio. Estuvo más activo, pero tan intrascendente como siempre. Además, el conjunto hispalense pierde control de esta forma, porque Reyes, que calidad tiene a raudales, la aprovecha mal. Ejecuta sus acciones lejos del área, y ahí es menos determinante y menos eficaz. Lo dicho, intrascendente.
Tampoco funcionó como en otros días la banda derecha, aunque una vez que conectó llegó la jugada del penalti y posterior 3-1.
Y tampoco funcionó algo que viene fallando en los últimos encuentros, la concentración y la cabeza. Con 1-0 a favor el Sevilla bajó su nivel de agresividad, de intensidad, que apenas mantenía Rakitic, de seguridad. Y el Español, flojo en defensa, se aprovechó de ello para meterse en el partido.
Curiosamente fue Cala, que suplió a Botía por lesión, el que llevó de nuevo la garra a su equipo, la garra y el gol. El central lebrijano tiene gol, tiene fuerza y ganas como ninguno. Si mantiene también el mismo nivel en concentración defensiva, puede ser útil para Míchel.
También es buena noticia, además del resultado, que el Sevilla encuentre jugadores y fuentes de aire en otros futbolistas que no sean los de siempre. Que si no es Reyes, es bueno que aparezca Cala, que Fazio vaya limpiando su imagen con un buen partido repleto de confianza tras el gol, que Diego López esté seguro...
Lo que parece más complicado es que futbolistas como Babá se sumen a la causa. Falló ante el Zaragoza y ante el Español ha vuelto a ofrecer una imagen desesperante. Debería pensarse el Sevilla eso de traer un delantero en enero.
Para entonces, el equipo nervionense debería seguir en la Copa, ya en octavos, porque tiene una buena renta para la vuelta y porque, pese a sus defectos, tiene muchos más argumentos que el Español.