Susana Díaz, de padres a hijos de abuelos a nietos...

'Una pasión llamada Betis, de padres a hijos, de abuelos a nietos'. Así reza uno de los lemas béticos, uno de esos mensajes que se verbalizan en sentimiento puro, apasionado, el beticismo, ni más ni menos. Susana Díaz, presidenta y candidata a la Junta de Andalucía, celebra el éxito de todos los equipos andaluces, aunque "todos saben" que tiene su "corazoncito". Y su corazoncito es verde y blanco, desde sus primeros pasos además.

Desde entonces, abonos y abonos cuidadosamente guardados, algunos ya amarillentos por el paso de tiempo, pero en todos un denominador común, un escudo del Betis, un número de socia, y su nombre, Susana Díaz. Los muestra con cariño, con orgullo, el de cualquier bético que se sabe y se siente.

"Mi primer recuerdo es ir con mi abuelo al campo de fútbol, con 5 o 6 años", recuerda mientras se le cuela entre tanta visión de presente y futuro algo de nostalgia.

Ya por entonces, en el voladizo del Villamarín, albergaba un mensaje, una idea, un avance. "Creo que en voladizo éramos dos mujeres nada más entonces, una mujer mayor y yo. Y abajo en preferencia una vecina mía que sigue viviendo en el mismo barrio, pero no es como ahora. Éramos muy pocas mujeres en un estadio, hace ya casi 40 años. No era la primera que iba al campo porque ya había otras mujeres antes, pero sí de las más jovencillas". Ahora, 40 años después, es también la primera mujer presidenta de la Junta de Andalucía.

"Ahora me encanta ver ahora a mi sobrinilla que va con José (su hijo) al campo. Ahí está llegando ya la igualdad", añade.

Su hijo José, no podía ser de otra forma, también es bético. "Mi hijo nació con el carnet. El padre lo llevó prácticamente al Hospital del Valme al nacer".

Y lo profesa. Revolotea con una pelota en el campo perfectamente ataviado con la indumentaria verdiblanca mientras se produce la entrevista. Lo hace con su primo hermano, Pepe, que es sevillista y le iguala en lo completo de la indumentaria, en este caso blanca y roja.

En su hijo José, la presidenta y candidata de la Junta vuelca sus valores, los que quiere llevar de nuevo al gobierno de Andalucía, pero también, por supuesto, toda su pasión verdiblanca.