Se prevé una buena entrada pese a las dudas
La derrota ante el Granada escoció y mucho, pero la Segunda no da tregua y el Málaga tiene este sábado otro partido de vital importancia. Ya no es que el ascenso directo esté más lejos que nunca, es que peligra el play off si el equipo sigue en esa línea descendiente. La Rosaleda será el escenario de un Málaga-Extremadura de necesidades, para unos por arriba y para otros por abajo. Y la afición responderá de nuevo pese a las dudas y el disgusto de Los Cármenes.
El club ha vendido alrededor de 3.500 entradas para el duelo de este sábado (16:00 horas), y las promociones también deben surtir efecto para que las gradas del estadio de Martiricos estén pobladas para el duelo de la jornada 34 ante el cuadro extremeño. Al margen de esos billetes, la entidad ha vendido unas 500 correspondientes a la promoción de pases infantiles y para peñistas a cinco euros, y ha regalado unas 700 a todos los aficionados que se acercaron a La Rosaleda a donar sangre el pasado jueves (más las 600 que mandó al Extremadura).
Es decir, el Málaga se ha 'desprendido' de unas 4.500 entradas para el duelo ante el Extremadura, por lo que a la venta quedan aproximadamente otras 4.000. Si la mayoría de socios acuden este sábado al estadio blanquiazul, debería superarse sin mayores problemas la cifra de 20.000 espectadores, es decir, pese a las dudas y la negativa dinámica del equipo se prevé una buena entrada en La Rosaleda, que debe ser clave en el tramo final de temporada.
