A mostrar la cara de casa en El Sadar
El Málaga debe mostrar su cara de líder fuera de casa. El equipo malagueño sigue intratable como local, pero lleva varias jornadas mostrando más dudas lejos de La Rosaleda. En esta jornada 12 le toca visitar al Osasuna (18:00, Movistar Partidazo), un rival llamado a luchar por el ascenso, que en estos momentos se encuentra a doce puntos de la cabeza, pero que en casa aún no sabe lo que es perder.
Recuperar la sintonía fuera en un campo aún imbatido
El Málaga ha logrado sólo uno de los últimos nueve puntos posibles fuera de casa, cayendo en sus visitas a Las Palmas y Elche y cosechando un empate ante el Deportivo de la Coruña. Debe empezar a sumar nuevamente de tres en tres lejos de La Rosaleda, aunque en El Sadar no será fácil, pues los rojillos no saben lo que es perder en casa esta temporada, obteniendo tres victorias y dos empates en sus encuentros como local.
Campo complicado pero no adverso históricamente
El Sadar es siempre un estadio incómodo para los equipos que actúan como visitantes. Su afición suele empujar mucho a los suyos y crear un ambiente bonito para el fútbol, pero difícil para el equipo visitante. De todos modos, históricamente no se le ha dado mal al Málaga jugar en el estadio navarro. En 14 visitas ligueras en los últimos 20 años, el Osasuna ha logrado ganar en sólo dos ocasiones, por cinco victorias malaguistas, una de ellas el histórico 1-6 de la temporada 2004/2005, siendo lo más común las tablas en el marcador, resultado que se ha producido en la mitad de choques entre ambos clubes cuando los blanquiazules han rendido visita a los rojillos.
Miedo a la catapulta
Jagoba Arrasate ya ha dejado ver esta semana que está trabajando para contrarrestar el juego a balón parado del Málaga, sobre todo poniendo especial interés a los saques de banda que efectúa Luis Hernández. En El Sadar ya han vivido en directo esta situación, pues fue allí donde el central debutó con el club malagueño y lo hizo con una asistencia a Camacho desde la línea de cal, mostrando por primera vez ese día su catapulta como malaguista.
Las bajas marean a Arrasate
El técnico rojillo no podrá contar para este encuentro con Oier Sanjurjo, que hasta el momento había disputado todos los minutos de la temporada, pero que vio la quinta cartulina amarilla en el partido ante el rayo Majadahonda. También cuenta con la duda de Iñigo Pérez, que tras perderse los tres últimos partidos por lesión se incorporó ya esta semana a los entrenamientos. Dos piezas claves para Arrasate que debe buscar el modo de encajar el puzzle.
Más claro lo parece tener Juan Ramón Muñiz, que seguirá sin poder contar con Harper por el esguince sufrido en el entrenamiento previo al choque ante el Numancia, pero que, visto el buen rendimiento de Mamadou Koné, es muy probable que repita el once del pasado lunes.
De último a primero
El Málaga, en la jornada anterior, tuvo que disputar el último encuentro de la misma, por lo que debió enfrentarse al Numancia con el conocimiento de los resultados de sus rivales en la parte alta de la clasificación, con el condicionamiento que suponía saltar al campo fuera de los puestos de ascenso. En esta ocasión, de los equipos implicados, será el primero en salir a escena, por lo que un buen resultado ante el Osasuna pasará la presión a sus rivales, que presentan choques complicados esta semana, como la visita del Dépor a Las Palmas o del Granada a Zaragoza.
