Óscar Caro, el otro malagueño de la Roja

Isco Alarcón no será el único con un cosquilleo en el estómago cuando el avión de la selección española aterrice en Málaga poco después del mediodía del próximo viernes. En la cabina del avión, muy cerquita de Julen Lopetegui, estará Óscar Caro, preparador físico de la selección y el otro malagueño de la Roja. Se trata, como Isco, de un talento precoz, pues Óscar Caro sólo cuenta 32 años pese a su estatus, gran experiencia y cualificación académica.

Entre sus estaciones estuvo La Academia del Málaga, de la que formó parte durante casi dos temporadas para poner después rumbo a la Aspire Academy de Catar y más tarde al Alcorcón, de Segunda División. Hace poco más de un año, y cuando sus pasos se dirigían al Levante con Muñiz, recibió la llamada de Lopetegui, primero para el Wolverhampton y luego para la selección absoluta, donde se encarga desde entonces de poner en buen tono físico a los mejores jugadores del mundo.
El destino le llevará esta semana a La Rosaleda, muy cerquita del Parque del Sur, donde dio sus primeros pasos y aún vive gran parte de su familia. “Desde el césped del Anexo se ven los edificios míticos del barrio en el que nací y me crié”, relata Óscar Caro, quien reconoce que ésta no es una semana cualquiera. Mañana se inicia la concentración y de viernes a domingo disfrutará de su Málaga como preparador físico de la selección española. Antes de que todo empiece, atiende desde Madrid la llamada de ElDesmarque.
- Ilusionado por eso de jugar en Málaga…
- Va a ser un día bastante bonito, tengo muchas ganas que llegue ya. Vamos a preparar el partido de buena forma, con la ilusión de que nos salga un buen partido.
- ¿Cuánto hace que no pisa La Rosaleda?
- Justamente fue a revisarla el pasado sábado, para inspeccionar el estado del césped como solemos hacer previamente en las sedes donde jugamos. Vi los vestuarios y olí ese aroma tan peculiar del pasillo de La Rosaleda.
- ¿Cómo vivió que Málaga fuera la sede?
- Estos dos partidos amistosos se han cerrado justo tras la clasificación. Supe de los rivales y de las sedes que estaban a expensas, la capacidad de los estadios… Y me enteré horas antes de que se hiciera oficial. Lo vimos muy apetecible.
- ¿Le ha llamado mucha gente?
- Imagine… Toda mi familia es de allí, amigos, compañeros del pasado, del propio club... Muchas llamadas y mucha gente a la que le hará ilusión verme allí. Y a mí también de que se alegren y poder compartirlo con ellos aunque sea desde el césped.
- ¿Qué le dice el seleccionador Julen Lopetegui sobre Málaga?
- Es un sitio que siempre le gustó. Hay que recordar que es el primer partido después de la clasificación, y es bonito que sea en Málaga. Era una opción que a todos nos gustaba y él le agrada bastante. Le gusta mucho el ambiente, lo cercana que es la afición y cómo se vuelca con el equipo. De hecho, el ritmo de venta de entradas confirma lo que pensábamos, que iba a ser un día grande y bonito, y que íbamos a recibir el apoyo de Málaga.
- ¿Cómo le va en su puesto de preparador físico de la Roja?
- Me va muy bien. Todo va marchando por ahora en buena línea. Hemos conseguido ese gran objetivo de esta en el Mundial, así que satisfecho, contento con el grupo técnico y por poder aportar un granito de arena. Personalmente eso se traduce en buenas alegrías. De hecho, en un par de meses nacerá mi segundo hijo. El primero se llama Lucas y este se llamará Diego.
- ¿Qué tal es la convivencia profesional con las estrellas de la selección?
- Hablamos de los mejores jugadores del mundo, pero la convivencia es muy sencilla y muy similar a otro club, porque el nivel de profesionalidad que hemos percibido es muy alto. Si están aquí es porque son buenos y porque han sido profesionales de máximo nivel en cuanto a entrega, sacrifico, ganas de seguir mejorando… Para nosotros se nos hace muy sencillo. Y, si hay diferencia en trabajar en un club, es para positivo.
- ¿Cómo fue su etapa en el Málaga?
- Duró casi dos años (año y ocho meses). Llegué a La Academia formando parte del cuerpo técnico del cadete autonómico y con labores en el Área de Metodología. A la campaña siguiente me dieron la oportunidad de formar parte del segundo equipo, del Malagueño, pero en el mes de febrero salió una opción para salir al extranjero, en Catar, y tuve que tomar la decisión.
- ¿Mantiene amistades en el club?
- Sin duda que sí, muchos amigos, compañeros... El sábado me encontré con algunos, con Enrique, Manu, Iván… gente muy cercana en mi época. Es un club familiar, amigo y con mucha gente dentro a los que le tengo mucho aprecio y que sé que es algo mutuo.
- ¿Cómo ve al equipo?
- Está en una situación compleja, pero creo que hay mimbres y un trabajo que tiene que dar frutos. Han habido momentos en los que mereció más, pero pequeños detalles te caen de contra, demasiados. Esperemos que ese buen trabajo y la entrega de los chicos tenga resultado y que se revierta una situación que no es agradable para nadie. Ojalá saquen el partido ante el Deportivo y se cambie la dinámica.
- No me puedo quedar sin preguntarle por Isco…
- Isco es el bueno, el importante, y, afortunadamente, lo tenemos con nosotros. Es de la tierra y es un orgullo. A él también le hará una ilusión tremenda porque es un chico que quiere mucho a Málaga y tiene grandes recuerdos. Solemos hablar, comentamos cómo va el club, lo que vivimos... Para él va a ser un día bonito como malagueño y como malaguista y esperemos que le salga un partido de su nivel y que podamos disfrutarlo todos. Si él disfruta, todos los haremos.