Ascenso o fiasco

Todo o nada. El Atlético Malagueño se juega esta tarde (18:00) la temporada en 90 minutos. Un partido que puede servir como colofón a una campaña brillante en la que el conjunto blanquiazul dominó de cabo a rabo su grupo en Tercera División. Segunda B está a tiro de un partido. Un año en juego en hora y media. El ascenso exigirá una machada. Después de cinco minutos finales fatídicos en Madrid el equipo de Manel Ruano se ve contra las cuerdas. El 2-0 de la ida le obliga a una ambiciosa remontada.

La plantilla cree. Y el técnico también. Los mensajes de aliento y motivación han sido abundantes durante toda la semana. El Malagueño se siente capacitado de dejar en la cuneta al Unión Adarve. En la ida tuvo el partido más o menos controlado durante 87 minutos, pero todo se fue al traste en los instantes finales. Tendrá que hacerlo sin su jugador bandera, Ontiveros, recientemente operado del pubis.
El campo de la Federación Malagueña de Fútbol estará hasta la bandera, como ha sido una constante durante todo el playoff. Los malagueños no han encajado un solo gol en casa en las dos eliminatorias anteriores (ganó 1-0 a la Gimnástica Segoviana y 3-0 al Peña Deportiva de Ibiza). Será fundamental mantener la portería a cero para que el sueño de la remontada sea posible. Un gol visitante obligaría a los de Ruano a marcar cuatro tantos.