El jeque descarta la oferta china y continúa al frente del club

Fin al culebrón. La familia Al-Thani ha dicho no a la oferta que tenía encima de la mesa de un consorcio chino para comprar sus acciones del Málaga, además del interés tibio e incipiente de un fondo de inversión inglés. Todas las propuestas habidas y por haber han sido descartadas por el propietario en la boca de su hijo en una cumbre que ha tenido lugar este mediodía en la residencia de la familia en una barrio residencial al este de la capital.

A la misma cumbre ha acudido Nasser Al-Thani, vicepresidente del club, y su hermano Nayef, un asesor personal de marbella que hizo las veces de traductor y otros dos asesores, uno de ellos Daniel Pastor, con conocimiento exhaustivo de la oferta formal de compra del consorcio chino y de los números del club al ser el responsable de la deuda de la entidad de Martiricos tras el proceso concursal del que fue administrador. El asesor personal de la familia se encargará de informar del contenido de la reunión de una forma directa el jeque Al-Thani en los próximos días en Dubai. También acudió de una forma testimonial Joaquín Jofre, abogado del Málaga, que se personó para entregar una documentación solicitada.
La reunión comenzó pasado el mediodía y se prolongó hasta poco antes de las 14:30 horas de la tarde. Para entonces algunos medios hacían ya guardia en la entrada del domicilio y ya era de dominio público que el Málaga no iba a ser vendido. Nasser empleó las redes sociales para comunicarlo en su perfil de Twitter. Poco después salían los otros protagonistas de la cumbre y uno de ellos, Daniel Pastor, ratificaba ante los medios las palabras del hijo mayor del jeque: “Me ha confirmado que el club no está en venta, que se van a tomar el asunto con rigor y que el jeque quiere seguir manteniendo la categoría del equipo”.
Pastor se mostró “agradablemente” sorprendido por la actitud de Nasser, del que dijo que está al día de las cuentas y que se ha comprometido a no descapitalizar el equipo y a buscar financiación para afrontar los pagos inminentes mediantes patrocinios y una “primera inversión inmediata”, a lo que le acompañará un plan de pagos a los proveedores, empezando por los más pequeños. A finales de junio, el propio Pastor deberá presentar tales números y verificarlos ante el juez de lo Mercantil.
De este modo, se descarta definitivamente la venta a los chinos, el jeque seguirá al frente de la propiedad del Málaga y Nasser Al-Thani tomará más implicación en el día a día de la entidad, ya sin Moayad Shatat, y con mucho por hacer no solo en el apartado financiero, sino también en una planificación deportiva que se encontraba en 'stand by' a la espera de acontecimientos. La nueva etapa no es tal, es más bien un proceso de continuidad que no ilusiona en demasía a los aficionados blanquiazules.