Un Ciutat sin aficionados granotas hasta 2021

LaLiga se prepara para jugar a puerta cerrada durante los próximos meses. El Consejo Superior de Deportes (CSD) ya dejó caer este martes que no habría grandes congregaciones de público hasta la existencia de una vacuna. Este miércoles, dando continuidad a esa idea, el propio Javier Tebas ha dejado caer a los clubes que el fútbol se jugará sin público hasta el año 2021. Esto afecta al Levante UD de manera directa, ya que los granotas se encuentran con varios proyectos entre manos.

Tebas se ha reunido de manera telemática con los presidentes, vicepresidentes o directos generales de LaLiga Santander y LaLiga SmartBank. El objetivo no era otro que explicarles los acuerdos a los que se llegaron en la reunión con el CSD y la RFEF, según informa el Diario As. El presidente, entre otras cosas, ha transmitido un mensaje realista y ha insistido en la idea del Gobierno de España de que no haya grandes espectáculos con público hasta el próximo año.

Esto deja al conjunto levantinista en una complicada posición ya que el fútbol es menos fútbol sin publico y los ingresos del club valenciano podrían disminuir en una temporada en la que el Levante tendrá varios proyectos como lo son la nueva ciudad deportiva y la reforma del feudo granota.

Javier Tebas, durante un acto público (Archivo).

Javier Tebas, advierte de la situación que se avecina

En este sentido, el presidente de LaLiga incidió sobre las consecuencias económicas que tendrán para todos los clubes el hecho de jugar sin público. Una situación delicada a nivel social, pues todos dejarán de ingresar importantes sumas de dinero en conceptos de abonos, ingresos fijos, y entradas, que entra en el apartado de variables. Además, también influirá en el 'merchandising' y todo el consumo que se genera en torno a un estadio durante cada día de partido.

Esto podría afectar de manera seria al Levante ya que el club de Orriols se encuentra con varios proyectos entre manos, entre los cuales se encuentran la reforma del estadio y la construcción de la nueva ciudad deportiva. Por una lado, tanto tiempo sin que el estadio se llenase de aficionados podría ser positivo para acabar la obra, aunque también sería negativo ya que la entidad deportiva valenciana no lograría tantos ingresos.