El líder de Segunda no hace prisioneros

Seguro que el Convenio de Ginebra no lo aceptaría pero el Levante UD, en la batalla por el ascenso a Primera División, no es un equipo al que le guste hacer prisioneros. Los partidos en que entra en juego el conjunto granota suelen decantarse hacia uno u otro lado, la mayor parte de veces a favor de los intereses de los discípulos de Muñiz y, de momento, sólo se han saldado con cuatro derrotas. Tan sólo en otras cuatro ocasiones hubo armisticio, en una trayectoria que convierte al equipo de Orriols en el que menos empates concede de los 22 que participan en la Liga 1|2|3.

Tan sólo el Nàstic en territorio catalán, que fue el primero que firmó tablas con los granotas en la tercera jornada, el Almería en el Juegos del Mediterráneo y el Getafe y el Cádiz en el Ciutat de València, pueden decir que han igualado finalmente en el marcador con el Levante. Desde la visita de los amarillos al feudo de Orriols, los azulgrana no han empatado y de eso hace ya más de tres meses. Y es que fue un 12 de noviembre cuando los discípulos de Álvaro Cervera arrancaron un 0-0 en el último 'tropiezo' de los de Muñiz actuando como anfitriones. Desde entonces, han sido cinco triunfos consecutivos contra el Tenerife, Rayo Vallecano, Lugo, Numancia y Nàstic de Tarragona.
El Levante se convirtió en esta pasada jornada 25 en el equipo que menos empates firma de la categoría de Plata después del 0-0 que registró el duelo entre el Valladolid y el Tenerife en el Nuevo José Zorrilla. Los granotas también son el conjunto que menos derrotas ha sufrido, con cuatro y una menos que Getafe y Tenerife y, de largo, el que más triunfos lleva con 17, cuatro más que el Girona (13). Y es que por algo es el primer clasificado con tanta diferencia respecto a sus perseguidores: nueve sobre los gerundenses y 15 por encima del Cádiz.