El Levante es un anfitrión de lo más amable

Tanto fue el cántaro a la fuente que, finalmente, el Levante UD terminó por ceder en el estadio Ciutat de València, un escenario que con mayor o menor sufrimiento habían convertido los granotas en su tabla de salvación pero que fue conquistado por el Celta. Contra el Málaga y, sobre todo, Granada y Eibar se ganó con suspense pero los latigazos de orgullo no sirvieron para vencer a un rival superior como los celestes. Un adversario que, como siete de los ocho últimos que han pasado por Orriols, se adelantó en el marcador. El otro fue el Deportivo en un partido en el que el marcador no se movió.

El Levante se juega el ser o no ser, el estar o no estar, en Primera en estos encuentros pero es incapaz de reaccionar si su adversario no le hace gol pero esta vez no hubo tiempo ni fútbol para darle la vuelta a la tortilla. Charles marcó para el Celta en el 87' y ya no hubo tiempo para la machada como sí que sucedió contra el Granada y el Eibar. Pero es que, además, el conjunto que dirige Eduardo Berizzo pudo marcar más goles. Los gallegos, al fin y a la postre, golpearon primero y ya son el octavo rival que se adelanta en el marcador de los 10 que han pasado por el Ciutat de València en la era de Lucas Alcaraz y el séptimo consecutivo si no se cuenta al Depor. Una circunstancia complicada para un equipo que pelea por la salvación.
Este peligroso 'juego' empezó con la visita del Getafe y ya ha llovido: fue el 8 de diciembre. Los azulones hicieron subir el 0-1 al luminoso por medio de un tanto de Yoda mientras que el Levante igualó con un cabezazo de Rafael Martins a centro de Nikos, en el 71'. El siguiente en pasar por el coliseo azulgrana fue la Real Sociedad y también marcó en primer lugar, en este caso lo hizo Canales. Los de Lucas salvaron los muebles en el último suspiro con un lanzamiento desde los 11 metros de Ivanschitz. El Depor también desfiló por Orriols en un 0-0 reflejo de uno de los peores encuentros que se le recuerdan a los levantinistas en su feudo y, posteriormente, llegó el Athletic, al que se le aguantó durante la primera mitad pero Aduriz, por dos veces, golpeó para que los tres puntos volasen de la capital del Turia.
La preocupante saga continuó contra el Málaga aunque, por tres veces seguidas, hubo final feliz para el Levante. Los de Javi Gracia de nuevo se adelantaron pero David Barral, en tres ocasiones, y Kalu Uche, enviaron la pelota a la red para firmar un 4-1 que hacía respirar al equipo. Luego llegó el Granada en el partido más emocionante que se recuerda en tiempo en Orriols: El Arabi firmó el 0-1 pero Camarasa y David Barral rubricaron la machada para el 2-1 final. Y, luego, tocó la visita del Eibar, que cómo no abrió el marcador pero Barral y Uche, en dos minutos, ya habían salvado los muebles. Por último, el Celta dio el primer puñetazo y el único del encuentro de esta 28ª jornada y no hubo tiempo ni capacidad para la reacción.
Todo esto es muy diferente a los dos primeros encuentros de Alcaraz en el Ciutat de València, contra el Almería y el Valencia. En ambos encuentros marcó primero el Levante y en los dos se llevó la victoria. El derbi fue el 23 de noviembre, así que ya hace cuatro meses desde la última vez que se adelantaron los azulgrana. En total, el técnico granadino ha dirigido 20 partidos de Liga a los granotas y en 14 marcó primero el adversario (Celta en Balaídos, Sevilla, Getafe, Real Sociedad, Atlético, Elche, Villarreal, Atlético, Málaga, Barcelona, Granada, Eibar, Real Sociedad y Celta), mientras que en cuatro lo hicieron los granotas (Almería, Valencia, Espanyol y Rayo Vallecano). En los otros dos, frente al Deportivo y el Córdoba, no se alteró el 0-0 inicial. Y, de los últimos 15 encuentros, el Levante sólo se adelantó en uno: en Vallecas y tampoco sirvió para mucho ya que perdieron por 4-2.