El Leo Messi más personal: su infancia, el tiempo libre con Antonela y sus hijos y el fútbol como espectador
El diario argentino Olé cumple 25 años y lo han querido celebrar con una extensa entrevista al capitán del FC Barcelona Leo Messi. El '10' no ha dejado demasiadas pistas sobre su futuro, aunque sí ha mostrado su faceta más personal en cuanto a su vida familiar, su pasión por Argentina y su día a día en la ciudad condal.
Sus inicios en el fútbol: "Con cuatro o cinco años yo ya andaba con la pelota, desde que empecé a caminar. Me acuerdo de mis primeros partidos de Grandoli, en la cancha. Tengo hermanos más grandes, primos más grandes y siempre, siempre nos juntábamos a jugar con ellos. A los cuatro empecé a jugar en el club, y en la calle todo el tiempo. Me acuerdo de los partidos que se armaban con mis amigos, de estar todo el tiempo con la pelota. De estar con los más grandes y que no me dejaran jugar, porque era muy chico".
Su tratamiento: "No sólo fue por el fútbol, sino que era un bien que me iba a servir a mí para la vida, la vida cotidiana, no sólo para ser jugador. En ese sentido, soy muy responsable. Cuando tengo que hacer algo, cuando me propongo algo, intento llevarlo al máximo y luchar por lo que quiero".
La llegada a Barcelona: "Tomar esa decisión fue difícil, pero al mismo tiempo fue rápida. Ni lo dudé, sin pensar. No entendía bien lo que significaba irme de mi país, de mi gente, de mis amigos y empezar otra vida en otro lado, tan lejos. Y al principio fue duro. Fue duro porque cuando yo llegué no podía jugar por un tema de papeles y después empecé y me lesioné".
Los regresos a Rosario: "Siempre andaba llorando, no me quería quedar pero al mismo tiempo sí. Quería venir a Barcelona para seguir haciendo lo mismo, pero al mismo tiempo me costaba dejar todo lo que tenía ahí en Rosario. Sabía que después pasaban seis meses para volver a estar ahí y compartir todas esas cosas".
El tiempo con sus hijos: "Tengo suerte porque hay padres que no llegan hasta la noche, como le pasaba al mío, que estaba todo el día laburando y yo lo veía llegar a las nueve de la noche, muerto. Yo tengo la suerte de estar prácticamente todo el día con ellos, poder llevarlos al colegio, ir a buscarlos, llevarlos a fútbol, a otras actividades y me encanta".
Su tiempo libre: "Antonela y yo salimos poco. Más que por quién soy, por el día a día de los chicos. Tenemos tres chicos y al final te terminas adaptando a la rutina de ellos. Salen del colegio y hacen alguna actividad. Ya cuando se duermen, caemos nosotros también. Terminas muerto".
¿Cómo llevan la fama sus hijos?: "A Thiago no le gusta, no le gusta que lo reconozcan. El carácter de él es muy tímido y lo pasa mal. Y Mateo todo lo contrario, le chupa un huevo que lo reconozcan, o que digan esto o aquello, le da lo mismo".
La privacidad: "Lo peor es el tema de las salidas. Quieres pasar inadvertido o quieres hacer cosas normales, y meterte donde hay mucha gente o en una tienda es más complicado, pero tampoco pasa de que te conozcan, de una foto, de eso... Es que hay momentos que uno quiere estar sin esa presión".
Lo positivo de la fama: "A veces quieres pasar inadvertido pero al mismo tiempo es hermoso que la gente te reconozca y te digan cosas lindas. Tengo la suerte de que, vaya donde vaya, siempre tuve un reconocimiento, una palabra linda de uno, pedido de foto y eso también es lindo".
Su pasión por volver a Argentina: "No sé qué es, no sé cómo explicarlo. A mí me encanta ir a Rosario, estar con mi gente. Reencontrarme con amigos, familiares, comer asados con ellos, juntarme... No sé, quizás el hecho de irme tan chico también y no haber disfrutado de todo como a mí me hubiese gustado, del país o de mis amigos, hace que quiera seguir volviendo, que quiera estar ahí. También es verdad que cada vez que voy es muy poco tiempo y pasa rapidísimo".
La tecnología: "Como todos, con el teléfono estoy muchísimo, todo el tiempo. Otras cosas no, pero con el teléfono, mucho. No estás haciendo nada pero estás boludeando en el teléfono sin hacer nada".
Leo Messi como espectador del fútbol: "Miro, miro bastante. Me gusta mirar diferentes ligas. Seguir, estar al tanto. Me gusta estudiar los rivales, cómo presionar, dónde poder hacer daño, más allá de que tenemos entrenadores o nuestra gente, pero me gusta observarlo también y ver".
La foto tras ganar la Copa del Rey: "Eso es hermoso, ver a muchos chicos que salen de abajo, que sienten lo mismo, yo sé lo que siente el que sale de abajo porque yo sentía lo mismo. O hacer la foto con los más veteranos, que es un título más a nuestra conquista. Fue un momento lindo en todo sentido".
Las camisetas que le faltan: "La de Ronaldo, la de Roberto Carlos, jugadores que me enfrenté y hoy digo me hubiese gustado tener esa camiseta. Después seguramente alguna me falta, pero tengo la mayoría".
