Cómo remontar un 2-0 en 54 segundos
Era el minuto 86:16. Rakitic acababa de enviar un cabezazo al palo y el Barça no encontraba la manera de hincar el diente a un buen Sevilla, que perdonaba una y otra vez la sentencia con un sinfín de contragolpes desperdiciados. El 2-0 se mantenía en el marcador con poco más de tres minutos para llegar al descuento e incluso se oían 'olés' desde la grada.
Los aficionados más cautos del Sánchez-Pizjuán preferían esperar. Porque había salido Messi, y con él en el campo todo era posible. Pero lo cierto es que en el estadio se empezaba a hablar de la primera derrota liguera del Barcelona, que se había plantado en la jornada 30 sin perder ningún partido y que caía 2-0 ante un Sevilla imprevisible durante este curso.
Empezó a acumular córners el Barça en el tramo final y en uno de esos, se empezó a cambiar el sino del partido. En el 87:15, Coutinho cuelga el balón al área desde la esquina derecha. Paco Alcácer la toca en el primer palo, Piqué no llega a rematar y Luis Suárez, en el 87:18, hace el primer gol culé en Nervión y da esperanza al equipo de Valverde. 2-1.
A partir de ahí, se suceden 54 segundos que la grada del Sánchez-Pizjuán aún no ha logrado comprender demasiado bien. No les dio tiempo a dar un último ánimo al equipo, porque Piqué recogió rápidamente el balón del fondo de la red y se lo llevó de nuevo al centro del campo.
En el 87:35, los jugadores del Barça ya estaban en su campo esperando el saque inicial del Sevilla, que se produce en el 87:43, cuando pita el colegiado. Al equipo hispalense apenas le dura 15 segundos la posesión del balón y los culés lanzan un ataque rápido justo cuando se cumple el minuto 88:00.
Jordi Alba profundiza por la banda izquierda, se la da a Coutinho en el lateral del área, el brasileño retrasa al balcón de la zona de castigo, Luis Suárez la ve pasar detrás suya y durante un breve instante, se para el tiempo: llega Leo Messi en carrera y carga su pierna izquierda, la mejor de las dos buenas. Minuto 82:12: el argentino la pone junto a la base del palo de Sergio Rico, que toca el balón pero no logra impedir el gol.
En total, 54 segundos en los que el Barça anota dos goles, consigue igualar un partido que parecía perdido y logra mantener su condición de invicto. Y ya sólo quedan ocho jornadas de Liga.
precioso articulo maravillosamente redactado. Un aplauso para Juan Ignacio porque tristemente hoy, pocos redactores son capaces de usar más de dos fórmulas literarias sin repetirse o liarse. Gracias