Victoria balsámica

Victoria balsámica para el Deportivo en un partido con dos partes muy diferenciadas que acerca a los coruñeses al objetivo de la permanencia. Los goles de Joselu Mato y Pedro Mosquera le dieron el triunfo al cuadro herculino y permiten respirar a todo el deportivismo, incluidos los más de 20.300 espectadores que acudieron a Riazor para presentar un encuentro subrayado con rojo.

El Dépor, gris una vez más, inició el mediodía atascándose ante un rival de la zona media-baja, contra un Málaga que en A Coruña mostró su versión más tímida. El míster tampoco ayuda a solucionarlo con sus cambios continuos en una alineación en la que los pilares del equipo durante el mes de diciembre (Çolak y Andone junto a Babel) han perdido ascendencia al no tener su respaldo.
En nuevo primer tiempo para olvidar, el Deportivo mostró su falta de ambición especulando con el resultado. Sin continuidad con la pelota, carente de movilidad en tres cuartos y presión intensa arriba, los futbolistas de Pepe Mel desesperaron a una grada aborrecida con el juego de su equipo. Al Dépor le falta chispa, también deseo de agradar. Puede el miedo a encajar y los problemas se repiten: Joselu no logra aportar más que Andone, las bandas siguen sin encontrar dueño y la inestabilidad defensiva condiciona a los propios jugadores.
El Málaga saltó al césped de Riazor con la misión de incomodar al Dépor entre líneas, impidiendo las combinaciones interiores gestadas en las botas de Carles. La defensa de cinco hombres de Míchel no sufrió, prueba de ello es que Kameni se convirtió en un mero espectador durante los cuarenta y cinco minutos. En todo el primer tiempo, el guardameta malacitano solo tuvo que estirarse en una ocasión para detener un tímido disparo de Gil con rosca.
En defensa, las incorporaciones de Juankar por el carril derecho molestaron a Juanfran, siempre pendiente de arrancar hacia arriba por su costado. Más allá de ese pequeño desequilibrio, el Deportivo no sufrió, principalmente porque el Málaga renunció a destaparse.
El segundo tiempo comenzó de la mejor manera posible, con gol blanquiazul. Un centro lateral de Luisinho ejecutado con la pierna derecha encontró a Joselu en el interior del área y el punta de Silleda no desaprovechó la oportunidad para desnivelar la contienda. El testarazo del delantero del Stoke City, anticipándose a los centrales, resultó inapelable para Kameni y fue celebrado con rabia.
La falta de reacción visitante y los errores defensivos en el centro de la zaga pusieron en bandeja el segundo de la tarde para Pedro Mosquera. El mediocentro coruñés aprovechó un balón muerto en el corazón del área anotar su tercer gol de la temporada, el de la tranquilidad.
En la recta final, Camacho dispuso de la mejor ocasión para los de Míchel al mandar un zapatazo desde más de 25 metros al larguero, pero Luisinho estuvo más rápido que Rosales en el rechazo de la madera para evitar el 2-1.
Triunfo que permite llenar de aire fresco los pulmones blanquiazules a falta de seis jornada. La salvación, mucho más cerca. 
Todos los resultados en resultados.eldesmarque.com