Los errores individuales condenan a un Celta en pretemporada
El Celta está en pretemporada, la apuesta de Cardoso por salir desde atrás con la pelota necesita mucho trabajo y tiempo que no ha tenido. Los errores individuales, unidos a una sempiterna endeblez defensiva, propiciaron una nueva derrota donde las sensaciones fueron casi todas malas, especialmente en ataque, donde apenas se generó nada. Maxi Gómez, con su oportunismo, abrió un partido que ya todos daban por cerrado. A Cardoso le queda mucho trabajo por delante para llevar a cabo su idea de juego.
Cardoso cumplió con lo entrenado, Maxi Gómez empezaría en el banquillo en su estreno con el Celta. El uruguayo no es el único damnificado por la llegada del luso, Roncaglia y Boufal también salían de un once en el que hasta cinco canteranos formaban parte de el. De los internacionales citados en el último parón de selecciones, sólo tres, Brais, Okay y Aspas, partían de inicio.
Pero era la Real la que empezaba mandando en el partido, un equipo más hecho y con ganas de romper su gafe en Anoeta encontraba en una mala entrega de Jozabed la primera ocasión que Januzaj estrelló al palo largo de Sergio. Los de Garitano se apoderaban de un esférico que cuando era propiedad del Celta buscaba sacar jugado desde atrás.
Araujo no acertó a despejar un balón sin peligro que pudo costar un disgusto al Celta antes de que Emre Mor dispusiese de la primera ocasión viguesa a centro de Hjlusager. El Celta en su intento de sacar jugada la pelota volvía a cometer un nuevo error, esta vez en las botas de Kevin cuando sólo habían pasado 12 minutos de juego.
Un resbalón impide el 0-1
La presión txurri urdin impedía a los olívicos trazar su plan de juego pero en las escasas ocasiones en las que la salida de balón generaba ventajas en otras zonas del campo aparecía Aspas, que perdonaba el gol pasados los 20 minutos fruto de un inoportuno resbalón.
La zaga celeste sufría ante Juanmi que gozaba de una doble oportunidad tras ganarle el sitio a un Araujo desdibujado y lento.Tampoco estaban más acertados en labores defensivas Costas y Kevin, pero el gol donostiarra llegaría tras un error clamoroso de Jozabed. Su segundo fallo del partido que tras una serie de disparos rechazados por los celestes terminaría en el fondo de las mallas gracias al disparo de Oyarzabal.
Kevin salvaba, con un buen robo, el segundo tanto realista al birlarle el esférico a Juamni que se aprestaba a fusilar a Sergio en el minuto 43. El Celta, que apenas logró pasar de mediocampo y regaló tres opciones de gol a la Real se iba al descanso perdiendo por la mínima.
Zurutuza golpea en la reanudación
Cardoso buscaba cambiar al Celta con la entrada de Maxi Gómez por Emre Mor, pero sin que los jugadores se asentasen en el campo un centro de Januzaj era cabeceado por Zurutuza para poner el 2-0 en el 47. El centrocampista txurri urdin le ganaba el sitio a Néstor Araujo para rematar a placer ante la no salida de Sergio al área pequeña.
Pero el de Rochefort quería más y en el 52 estrellaba el balón al larguero perdonando el tercero. El Celta, al igual que sucedió en la primera mitad, apenas pasaba de medio campo y sus ocasiones de gol eran prácticamente inexistentes. Cardoso buscaba a Boufal en el banquillo para suplir a un poco incisivo Hjulsager.
El choque estaba cerrado, sólo la Real buscaba mayor premio ante un Celta muerto a merced de los de Garitano que seguían sumando ocasiones de gol. Los donostiarras, que se veían ganadores, bajaron la intensidad permitiendo un último arreón celeste.
Maxi recorta distancias
El Celta estiró las líneas, confió en su ataque y un centro de Brais cabeceado por Maxi Gómez abría de nuevo el choque en el minuto 83. En su primera aparición Maxi recortaba distancias. El uruguayo había pasado desapercibido hasta ese momento.
Cardoso se la jugaba quitando a Okay Yokuslu para dar entrada a Pione Sisto. El Celta se lanzaba sin red a por el empate. El turco se retiraba con molestias del partido. William José, ya en el descuento, estuvo muy cerca de marcar el 3-1 pero la cabeza de Kevin se interpuso en el remate del delantero donostiarra antes de que Melero López señalase el final del partido.
