Una gripe, eso fue lo que tumbó al vikingo

Las alarmas saltaban alrededor del minuto 38 del partido ante el Genk. El Celta perdía a uno de sus hombres de referencia, a John Guidetti, el sueco se ponía en cuclillas y pedía el cambio. Salido hace pocos días de una lesión muscular todo hacia indicar que el esfuerzo de los últimos partidos había vuelto a pasar factura al físico de Guidetti, pero no, tenía una gripe.

 
Una gripe tumbó al vikingo, Guidetti no podía respirar y tuvo que pedir ese cambio. Visiblemente frustrado se dirigió a la banda tras ser atendido por los servicios médicos del Celta, los que había avisado con tiempo para que Beauvue pudiese calentar un par de minutos. Ingresó de nuevo en campo del Luminus Arena para acabar sustituido en el minuto 41. 
Guidetti no estará de baja mucho tiempo, incluso podría llegar al partido de este domingo ante el Betis. Un proceso gripal que no le impidió saltar en el once inicial pero que sí le obligó a pedir el cambio antes de que el escocés Collum pitase el final de la primera mitad. Puede que Berizzo le de descanso, como al resto de titulares, pero la buena noticia es que el sueco no está lesionado.