Bouzas fue el lugar escogido para dar la bienvenida Genk

Como es costumbre, el Celta y el Genk realizaron en la mañana el encuentro entre directivas, en la que el presidente del club celeste, Carlos Mouriño, y el Alcalde de Vigo, Abel Caballero, ejercieron de anfitriones. En ocasiones anteriores se había escogido el Parque Quiñones de León para recibir al Shakhtar y el Paseo de Samil para el Krasnodar. En esta ocasión, el lugar escogido fue el puerto deportivo de Bouzas.

La noche del 13 de abril es especial tanto para el Celta como para el Genk. El conjunto belga ha alcanzado por primera vez en su historia los cuartos de final de una competición europea y el cuadro gallego tiene la oportunidad de romper su techo en Europa. La ilusión de los dos bandos por hacer historia se vio reflejado en el acto protocolario entre ambos clubes, en el que se intercambiaron elogios y reinó un ambiente totalmente deportivo.
Carlos Mouriño recibió a la expedición belga comentando que es "un gusto y un placer recibir a todos los componentes de la Junta Directiva del Genk. Esperemos ver un magnifico partido porque cuando dos equipos tienen un fútbol similar el espectáculo está casi siempre garantizado". Por su parte, Caballero recalcó que "el Celta y Genk, juntos, van a ser una muestra de lo que puede hacer el fútbol. Hacer amistad y buen clima".
Además del presidente del Celta y el Alcalde de Vigo, en el acto también estuvieron presentes otros representantes del club celeste y del Concello, además de la expedición del Genk, encabezada por su presidente, Herbert Houben, y representantes de la UEFA. El máximo mandatario del club belga también dejó patente el buen ambiente reinante entre ambos equipos. "Jugar en Europa nos da la oportunidad de encontrar nuevos equipos, gente y hacer nuevas amistades. Esperamos un gran partido esta noche en un partido repleto de juego limpio", afirmó Houben.