Sobriedad y pegada para dar un subidón

El Cádiz se impuso al Alavés en un partido en el que demostró que también puede tener pegada. Con un Perea en estado de gracia y una delantera de lujo formada por Lozano y Negredo, se impuso a un rival que era muy peligroso.

El equipo que llevó la iniciativa desde el inicio fue el Cádiz. En jugada y a balón parado pisaba el área de Pacheco con cierta facilidad y Negredo tuvo una gran ocasión a los seis minutos, pero su cabezazo le salió muy centrado tras un centro de Espino.

El equipo le estaba haciendo daño al Alavés por los costados y, con mucho suspense, llegó el primer tanto en el minuto 16. Una jugada muy confusa en un centro de Perea acabó en un gol de Álex a puerta vacía. El VAR revisó la acción y terminó concediendo el gol.

La alegría duró poco porque, acto seguido, se le señaló un penalti a Fali por un agarrón completamente innecesario. Tras ser revisada la jugada, se señaló la pena máxima y Joselu hizo el empate a los 22 minutos.

Había que empezar de cero cuando se había logrado lo más complicado. La consigna era no dar facilidades en campo propio y buscar constantemente a Negredo y Lozano. Tras el empate, al Cádiz le costaba mucho más pisar el área del rival, algo que hacía con fluidez en el inicio del encuentro.

La igualdad era máxima y ninguno le daba un momento de respiro al rival. Perea ponía la calidad en la izquierda, pero faltaba continuidad en el juego para que el albaceteño pudiera brillar. En el resto del primer tiempo hubo mucha pelea, pero poco juego, con faltas constantes.

La segunda parte estuvo marcada por la expulsión de Tachi en el minuto 50. El nuevo reto para el Cádiz era imponerse ante un equipo en inferioridad numérica después de que el defensa viera la segunda amarilla por una dura entrada sobre Lozano, que estaba siendo un peligro constante.

Y lo confirmó con un golazo en el minuto 55, rematando a bote pronto un buen centro de Espino. La cosa se ponía de cara, teniendo ventaja en el marcador y con un jugador más sobre el campo.

El Cádiz estaba encontrando los espacios que en el primer tiempo no aparecían. Perea firmó una buena jugada y en su centro pudo estar el tercer gol en el minuto 60, pero en esa ocasión Lozano mandó el balón desviado. El Alavés tenía que salir en busca del empate y eso hacía cambiar el escenario.

Tenía buena pinta el partido, pero el Alavés rozó el empate con un remate en el minuto 63, pero el disparo de Rioja se estrelló en el palo después de un leve desvío de Conan Ledesma.

Fue un gran susto que vino acompañado por otro estallido de alegría. Otra gran jugada de Lozano tras un pase fantástico de Fali acabó en gol de Negredo, que remató seco y al palo con su pierna buena. Corría el minuto 68 y ya la victoria no se debía escapar. Y Lozano pudo hacer el cuarto a renglón seguido tras un gran servicio de Jonsson, pero Pacheco se lo impidió.

Todo se había puesto de cara y daba la impresión de que estaba más cerca el cuarto gol que el segundo de los vitorianos, pero no se podía bajar la guardia. Negredo se encontró con el palo en el minuto 87 y después Perea estuvo a punto también de hacer el cuarto.