La semana especial de Álex Fernández
La presente semana está llena de significaciones especiales para Álex Fernández. El madrileño marcó un penalti muy importante en el partido contra el Albacete, este miércoles se cumplen ocho años de su debut en Primera con la camiseta del Real Madrid y acaba de cumplir 200 partidos como profesional.
El centrocampista ha defendido en esa etapa las camisetas del Real Madrid, Espanyol, Rijeka, Reading, Elche y Cádiz. Seis clubes y la sensación por sus propias palabras de que ha sido en el club amarillo donde ha encontrado la estabilidad y la felicidad que le ha podido faltar en etapas anteriores.
Su renovación en la presente temporada fue una de las noticias más esperadas por la afición cadista por el gran rendimiento ofrecido la pasada campaña. Eran varios los clubes que se habían interesado por su situación y el Cádiz supo hacerle una oferta para que siguiera de amarillo hasta el año 2022.
Ahora no pasa por su mejor momento en el plano deportivo porque no está siendo titular a pesar de que existe el convencimiento generalizado de que es uno de los jugadores con mayor calidad de la plantilla. El propio entrenador cadista, Álvaro Cervera, reconoció recientemente que era una situación incómoda porque el futbolista se merecía más minutos, pero que en sus exigencias no terminaba de entrar.
Álex Fernández ha respondido en el campo saliendo desde el banquillo y ofreciendo un buen rendimiento, con la máxima profesionalidad. El técnico cadista apuesta en las últimas semanas por José Mari, Garrido o Edu Ramos en el doble pivote y al madrileño lo ha ubicado por delante o en la banda, aunque en Tarragona sí jugó desde el inicio.
El jugador madrileño simboliza ahora ese banquillo de lujo que tiene el Cádiz y que se puede traducir en muchos puntos en la segunda vuelta del campeonato.
