¿Es Oblak de este mundo?

Nació un 7 de enero de 1993 en Škofja Loka, un pequeño municipio de Eslovenia que apenas supera los 10.000 habitantes. Se crió en las categorías inferiores del Olimpija Ljubljana y dio el salto al Benfica antes de fichar por el Atlético de Madrid. A día de hoy, se trata del portero más caro en la historia del fútbol español. Sus números le avalan: nadie encaja tan pocos goles en LaLiga Santander.

Son datos que evidencian la mortalidad del esloveno, que no pudo jugar el pasado jueves en Copenhague debido a una gripe. Sí, es humano; a pesar de que pasa desapercibido en el día a día, en el partido a partido del Atlético, en cada duelo en el que acaba con la portería a cero sin apenas despeinarse. Porque Jan nunca se pone nervioso.
Ante el Athletic, Oblak jugó su partido número 30 de la temporada. En 19 de ellos ha conseguido dejar su portería a cero y apenas ha encajado 13 goles entre todas las competiciones. De hecho, sólo dos equipos han sido capaz de marcarle dos goles en un mismo partido: el Girona en la primera jornada y el Chelsea, en el estreno europeo del Metropolitano.
Oblak empezó en clara desventaja con Ter Stegen en la lucha por el Zamora tras encajar tres goles en las dos primeras jornadas, pero apenas le han batido seis veces más en los 22 partidos de Liga siguientes. Todo ello, después de haber alzado el trofeo de portero menos goleado en las dos últimas temporadas de forma consecutiva.
El esloveno, que apenas ha encajado dos goles en sus ocho últimos partidos, se permitió el lujo incluso de hacer un par de regates en el duelo ante el Athletic, donde no recibió ni un solo tiro a puerta. Escoltado por una defensa férrea, Oblak sigue alargando unos números sobrenaturales partido a partido.