Mauri, el aldeano que ponía nervioso a Franco

Me ha tocado muy dentro el fallecimiento del legendario Mauricio Ugartemendia Lauzirika, "Mauri". Este pasado verano disfruté de, como digo yo, una de mis taras, como es el Athletic, así que me fui a Bilbao unos días porque quise conocer a jugadores históricos del club de San Mamés. A través de Jesús Llarena, el cura de Gernika, pude echar un buen rato con él. Fue fantástico. Le pregunté por muchas cosas y me contestó sobre todas ellas y, también, me develó otras muy curiosas y a la vez desconocidas para mi.

Ya saben los lectores de ElDesmarque cómo somos los periodistas, vamos muy directos a los datos concretos. Por ejemplo, le pregunté mucho por la final del 58, sí, la del "Con once aldeanos nos pasamos por la piedra al Madrid...", o del año de su debut. Todo eso Mauri lo tenía muy interiorizado, pero me llamó la atención que le daba mucha importancia a los partidos internacionales que había jugado con la selección española.

Yo quería llevarle hacia partidos históricos del Athletic y él me desviaba mucho la conversación hacia esos partidos internacionales. No por temas políticos, sino porque en aquellas épocas pretéritas jugar partidos en el extranjero era algo deportiva y humanamente realmente especial.

Me habló al detalle sobre un partido que jugó con la selección en Roma ante Italia, o me hizo hincapié en un partido internacional disputado con el Athletic frente al Manchester United en Inglaterra, no en el campo de Old Trafford, sino en el estadio del City Maine Road.

Un choque que nos remontaron los Reds porque nuestro portero, Carmelo Cedrún, se lesionó y tuvo que jugar gran parte del partido con el brazo en cabestrillo.

Mauri me contó cosas en las que yo no había caído: el asunto con Franco

Formando parte de la selección española tuvo que ir dos o tres veces a ver a Francisco Franco. Y me cuentan que por lo visto Franco, cuando descubría que en el grupo que recibía había gente de Gernika, se debía poner muy nervioso. Y eso le pasaba con Mauri, pero también con Rafa Iriondo.

Franco enseguida preguntaba a sus adláteres a ver si ‘¿hay alguno de Gernika?’. Y Mauri no disimulaba que estaba muy dolido con Franco por todo lo que había sucedido en su Gernika durante la Guerra Civil.

Otra anécdota impensable en estos tiempos de fútbol moderno

El Athletic, cada vez que jugaba en Madrid, se alojaba en un hotel que había en El Escorial. Y desde allí hasta el estadio bajaban los jugadores rojiblancos rezando el Rosario en el autobús. Eso me contó que era algo habitual en los desplazamientos, ir bien rezados al campo.

También tuvimos tiempo para que me hablara de nombres propios. Por ejemplo, anécdotas curiosas del entrenador eslovaco Fernando Daucik o lo buena persona que era el técnico de Eibar Baltasar Albéniz.

Como pueden entender me ha dado muchísima pena el fallecimiento de Mauri. Además, de 'Los Once Aldeanos’ que ganaron la final de copa del 58 al Real Madrid en el estadio de Chamartín ya solo nos quedan tres: el portero Carmelo Cedrún, al que quiero visitar pronto, Manolo Etura e Ignacio Uribe.

Aquel equipo fue histórico. Yo no sé si es el mejor de la historia del Athletic, me lo han preguntado varias veces, pero creo que sí es el más icónico de todos los de después de la Guerra. Porque ganarle aquella final de copa tal y como estaban las cosas en aquellos años, al Madrid que era y demás, fue impactante.

Lo de si ha sido el mejor o no tengo mis dudas, porque el de antes de la guerra de Mister Pentland fue muy bueno y ojo al equipo del 77 con Koldo Aguirre o el de Javier Clemente de los años 80 con las gabarras.

Pero creo que del ideario colectivo de la afición del Athletic es el más icónico, porque el de los 40 era maravilloso, pero solo se habla de los cinco integrantes de su delantera (Iriondo, Zarra, Panizo, Venancio y Gainza). Pero es que del de los 50 los once jugadores se han transmitido de generación en generación. Y eso tiene un peso específico importante.

· Por Iñigo Crespo, Periodista, Asesor y Director de Comunicación.