Gurpegui: "No sé si alguna vez podré devolver tanto cariño y respeto hacía mí"
Por favor, indica por qué quieres reportar este vídeo:
-
Gurpegui, el adiós de un capitán con ADN Athletic
-
Valverde, feliz: "Gurpegui se merece lo que ha ocurrido hoy"
-
Aduriz eleva a Gurpegui y el Athletic al quinto cielo
Carlos Gurpegui se despedía este sábado en San Mamés como futbolista profesional tras 15 temporadas en el primer equipo del Athletic Club, recibiendo el cariño, la admiración y el reconocimiento de sus compañeros de equipo y de toda la afición rojiblanca. Múltiples gestos que el de Andosilla ha recibido "abrumado", confesando no saber si va "a poder devolver algún día".
"Feliz, triste, contento, emocionado,...". Era la mezcla de sentimientos que se agolpaban en Gurpegui tras su adiós. Pero, sin duda, tenía claro que "cuando pensaba en una despedida pensaba en algo como esto". "Me he sentido abrumado por tantas muestras de cariño. Y, el haber ganado y terminar siendo quintos ha significado mucho para mi", expresó Gurpegui en la que fue su última aparición en la zona mixta de San Mamés.
"Muchos" son los detalles con los que se quedaba el capitán rojiblanco de su adiós. Pero rescataba algunos: "Cuando mis compañeros meterion gol, lo primero que hicieron era buscarme, cuando han cantado un irrintzi en la grada, que ha sido diferente; la gente que ha esperado hasta el final... No sé si alguna vez podré devolver tanto cariño y tanto respeto hacía mí. Es una pasada lo maravilloso que he vivido en este club y el cariño de la gente", ha admitido Gurpegui tras recibir su homenaje.
El navarro confesó que "lo primero" que quería "era ganar y dejar al equipo en el quinto puesto", además de despedirse "de la gente" que le ha dado "tanto"
Cuando San Mamés le brindó una ovación en el minuto 18, fue "una de las pocas veces" que ha llorado en un campo. Otra cosa que le llegó al corazón fue ver a "muchos compañeros llorando y dándome las gracias por ser su amigo; estoy emocionado por ello", explicó Gurpegui, que contó con el respaldo de "160 personas venidas de Andosilla".
Gurpegui no pudo despedirse como lo hizo Andoni Iraola, marcando un gol en su último partido, aunque no fue porque no lo intentaran sus compañeros. "Me estaba sientiendo hasta mal por me venía uno y me decía 'a quién te bloqueo'. Y yo, joder, voy a tener que meter un gol", relataba divertido. "Todos querían lo mejor, pero lo mejor es estar con ellos: el vestuario del Athletic, como ya dije, es una pasada, es gente maravillosa", subrayó.
El capitán navarro cuelga las botas con la satisfacción de sentir que "para mis compañeros soy una persona importante". Creo que les he transmitido cosas buenas y espero que se queden con lo bueno de mí".
El vestuario rojiblanco se queda huérfano de uno de los capitanes más carismáticos que ha tenido el Athletic en los últimos tiempos. Pero Gurpegui segura que el relevo está garantizado. "Está Aritz, está Gorka, está Raúl, que es un profesional muy grande, y también Markel, que lleva muchos años. No va a haber ningún problema en ese sentido", concluyó.