El termómetro de la undécima jornada

Termómetro de la undécima jornada de LaLiga Santander: 
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Tonny Sanabria: El delantero paraguayo del Betis vive uno de los mejores momentos de su carrera. Ha marcado siete goles en los siete partidos que ha disputado y el último se lo hizo al Getafe para iniciar la remontada de su equipo, que perdía 0-2 y acabo empatando 2-2. El año pasado, sus problemas de pubis le impidieron explotar, pero ahora es uno de los culpables de la buena campaña que está haciendo el conjunto andaluz. De hecho Monchi, director deportivo del Roma, podría meditar recomprar al jugador para venderlo al Atlético de Madrid.
 
Paco Alcácer: A falta de los goles de Luis Suárez, que completó frente al Sevilla su peor racha sin marcar en el Barcelona, apareció Paco Alcácer en la alineación de Ernesto Valverde para rescatar tres puntos para su equipo gracias a un doblete. Después de jugar sólo siete minutos en todas las jornadas, comenzó a mostrar su compromiso con el club azulgrana en el partido de Copa del Rey ante el Murcia, en el que hizo un tanto. Valverde tomó nota y le dio una oportunidad. Alcácer cumplió, salió ovacionado del Camp Nou y tal vez guardó las maletas que podrían sacarle en el mercado de invierno.
 
Thomas Partey: Se ha convertido en el futbolista antídoto del Atlético de Madrid cuando las cosas se ponen feas por la falta de fútbol del cuadro rojiblanco. El centrocampista ghanés dio la victoria al equipo de Simeone con un gol en el minuto 91 en Riazor ante el Deportivo y ha marcado tres de las últimas cuatro dianas del Atlético. Con un zapatazo hizo el empate ante el Qarabag en Liga de Campeones y contra el Elche en la Copa del Rey consiguió el gol que valió un empate. Se ha convertido en el remedio inesperado.
 
Dani Parejo: el referente de un equipo renacido, el Valencia, que con Marcelino García Toral en el banquillo por fin parece haber alcanzado el equilibrio para generar ilusión en una afición que hace no mucho criticaba a su capitán. Este fin de semana, Parejo se encargó de abrir el cerrojo del Leganés con un gol de falta de auténtico pillo. Intuyó el salto de los jugadores de la barrera, coló la pelota por debajo de ésta e hizo el 1-0. Su fútbol, su clase, su visión y su jerarquía se han convertido en un referente en el Valencia.
 
- BAJAN:
 
- Antoine Griezmann: restaban diez minutos para el final de un partido en Riazor, donde el Atlético de Madrid estaba obligado a ganar y era incapaz. Con empate sin goles Simeone quitó del campo al que debe ser referente ofensivo pero anda lejos de su verdadera identidad. Griezmann se fue con cara de pocos amigos pero sabiendo que lo primero que debe hacer es mejorar, recuperar la chispa perdida y aportar más gol a su equipo.
 
- Eibar: ocho jornadas sin ganar, el equipo con menos pegada de LaLiga Santander con solo seis tantos marcados en once jornadas y el segundo más goleado con 25 goles encajados. Lo peor la pésima imagen dejada por sus jugadores en un derbi vasco en Anoeta en el que solo existió la Real Sociedad y la desgana de un equipo que había acompañado en la elite siempre una imagen luchadora, con un estilo de fútbol que le convirtió en revelación y que ha desaparecido. Debe recuperar sus señas de identidad ya al límite de la zona de descenso.
 
- Karim Benzema y Cristiano Ronaldo: los delanteros titulares del Real Madrid reparten entre los dos tan solo dos goles en once jornadas de Liga. Ante Las Palmas tenían el partido perfecto para cambiar su dinámica. El francés estuvo desaparecido tras desperdiciar nada más arrancar el duelo un mano a mano con todo el tiempo del mundo para marcar antes de definir mal y fue silbado por su afición. El portugués se dejó todo buscando un gol que no llegó y acabó desesperado, sin celebrar el gol de Isco tras su buena asistencia, pero con el respaldo del Bernabéu.
 
- Pako Ayestarán: siete partidos seguidos con derrota de Las Palmas, cinco con Ayestarán al mando de un equipo sin rumbo, dejan al técnico en una situación límite. Sumadas las siete derrotas con las que cerró su etapa en el Valencia, le convierten en el técnico con más derrotas consecutivas de la historia de Primera con doce. Se aferra a su cargo, convencido de la reacción y sacando cosas positivas de la personalidad de su equipo en el Santiago Bernabéu, pero todo indica que con dos semanas para trabajar el equipo por el parón de selecciones, es tiempo perfecto para que un nuevo entrenador introduzca cambios antes de una final ante el Levante.