Afonsinho, el primer futbolista que luchó por derechos, abre festival Bilbao
El brasileño Afonsinho, (Afonso Celso Garcia Reis), el primer jugador de fútbol en luchar por los derechos sociales de los futbolistas, como la posibilidad de poder cambiar de equipo, visitará mañana Bilbao para inaugurar el "Thinking Football Film Festival".Este festival, organizado por la Fundación Athletic Club, busca reflejar el papel del fútbol en la sociedad. Mañana será la inauguración, con dos actos principales.
El primero, la entrega del premio del público de la edición del pasado año al director brasileño Pedro Asbeg, por su película "Democracia em preto e branco".
Esa obra recuerda al Corinthians del legendario Sócrates. Es la historia de la Democracia Corinthiana, cuando un club de fútbol fue la punta de lanza de un movimiento de libertad que vivió Brasil a principios de los años 80 del pasado siglo XX y que tuvo en el recordado centrocampista internacional a su mayor exponente.
Pedro Asbeg decidió donar los dos mil euros de premio a la escuela de fútbol para niños sin recursos que Afonsinho mantiene en la isla de Paquetá, en Brasil, y mañana los dos estarán en Bilbao.
Afonsinho, hoy médico psiquiatra, se convirtió en un símbolo de la lucha social y contra la dictadura militar en Brasil, que le negó el acceso a la selección porque con sus barbas y melenas le consideraban subversivo. Además, fue el primero en pleitear ante la justicia -y ganar- para poder cambiar de club.
A su lucha le dedicó una canción Gilberto Gil, "Meio de campo", y una película Oswaldo Caldeira, "Passe Livre".
Además de la entrega del premio, el otro acto destacado de la inauguración es la proyección del film inglés "I believe in miracles (Creo en milagros)", dirigido por Jonny Owen.
Recuerda como el Nottingham Forest llegó a ganar dos finales consecutivas de la Copa de Europa bajo la dirección de Brian Clough, poco después de que el técnico cogiese al equipo en la Segunda división inglesa.
Estarán en la Sala BBK, donde se proyectará el film, y dialogarán con el público asistente dos leyendas del legendario equipo británico: John Robertson y Garry Birtles.
