Nissan Qashqai, modernidad en esencia y en presencia
Siete años y dos millones de unidades después, llega la hora de la renovación para el Nissan Qashqai, uno de los coches de más éxito del mercado y, sin duda, el todocamino más apreciado y el que realmente ha dinamizado este segmento tan importante a nivel de imagen y ventas.
La nueva generación, que se lanzará en febrero, será reconocible a simple vista como una continuación estética del modelo actual, pero está bastante cambiado, sobre todo en el frontal, que está basado en el del futuro Pathfinder con rasgos que ya se han adelantado en el último restyling del Micra, con el capó en V dándole continuidad a la moldura cromada que abraza al logo de la marca.
La zaga es una evolución del actual aunque con una interpretación más agresiva de los pasos de rueda y del pilar C, que le dan un aire mucho más moderno, acorde con lo sugerido en el frontal y sus sofisticados faros, que podrán ser completamente de led. Las llantas, de hasta 19 pulgadas, le darán una presencia más deportiva.
El diseño interior se aprecia muy mejorado en cuanto a calidad y con elementos nuevos, como la pantalla central de 7 pulgadas, el freno de mano de accionamiento eléctrico o el cuadro de relojes con una zona central configurable incluso con diferentes tonalidades. Además, su habitáculo será algo mayor gracias a sus nuevas proporciones.
Y es que el nuevo Qashqai crecerá algo, aunque no demasiado. Se estirará cinco centímetros más, lo que permitirá incrementar el maletero en 20 litros, hasta los 430. Pese a que es 15 mm. más bajo la altura para la cabeza ha crecido en un centímetro en las plazas posteriores, que también deberían beneficiarse de la mayor anchura.
Más tecnológico
Si hay un aspecto en el que se va a notar más la evolución entre la primera y la segunda generación del Qashqai ese va a ser, sin duda, el apartado tecnológico. Y es que el crossover va a incorporar sistemas avanzados de seguridad englobados en el llamado ‘escudo de protección’ como son el control de crucero con frenado automático, los sensores de parking con cámara perimetral, las alertas de ángulo muerto y cambio de carril, lector de señales de tráfico, alerta por cansancio…
Pero además, contará con un sistema multimedia de última generación, asistente de aparcamiento automático, faros inteligentes, control dinámico del chasis… sin duda un salto de calidad respecto al modelo actual, que en este apartado tenía algunas lagunas.
El nuevo Qashqai estrenará una plataforma modular desarrollada para Renault y Nissan que, como ocurre con la MQB de Volkswagen, dispondrá de dos tipos de suspensión trasera según versiones: los Qashqai de dos ruedas motrices montarán un tren posterior torsional, mientras que los 4x4 recibirán el eje multibrazo.
En principio, la gama será básicamente 4x2, el sistema de tracción más sencillo y eficiente, pero el motor diésel más potente, el 1.6 dCi de 130 CV, también podrá disponer de la transmisión All-MODE-i 4x4 e incluso de una nueva caja de cambios de variador continuo (el resto de motores recibirán una manual de seis velocidades).
Inicialmente habrá tres motores disponibles, dos diésel (el 1.6 dCi de 130 CV ya mencionado y el conocido 1.5 dCi de 110 caballos con un consumo récord de 3,8 litros) y un gasolina, el 1.2 DIG-T de inyección directa y turbo con 115 caballos de potencia. Después, en verano de 2014, se unirá un 1.6 con la misma tecnología y 150 caballos que, como el resto de propulsores incorporará de serie el sistema de parada y arranque automáticos.
