Suspendida la medida de recogida en los bares de Sevilla: solo a domicilio

Mientras va avanzando el estado de alarma van cambiando algunas situaciones para adecuarse a la situación. Es el ejemplo de la hostelería de Sevilla, ya que el Ayuntamiento ha emitido una orden interna a la Policía Local en la que aclara que, desde este viernes, los bares y restaurantes pueden vender a sus clientes comidas y bebidas para consumir en los domicilios con servicio de recogida. Sin embargo, horas más tarde el propio Ayuntamiento ha dejado en suspenso la orden, a la espera de que sea autorizada por la Subdelegación del Gobierno.

Se trata de una propuesta de la Delegación de Transición Ecológica, que en un documento al que ha tenido acceso ElDesmarque recoge los requisitos y normas para que los bares podían abrir tras más de 40 días cerrados.

Sin embargo, la normativa estatal no permite la recogida in situ y la autonómica sí, por lo que entran en conflicto.

La normativa que pasó el Ayuntamiento

Los puntos del escrito son los siguientes:

- Únicamente podrían entregarse “in situ” (previo encargo) o servirse a domicilio, comidas comidas (elaboradas en sus cocinas o precocinadas con las garantías sanitarias correspondientes) y bebidas, que figuraran entre los ofrecidos en su día para su consumo habitual en el establecimiento.

- Las comidas y bebidas retiradas o entregadas se destinarían a un consumidor final, y en ningún caso podrían ser objeto de intermediación o reventa; en otro caso nos encontraríamos ante una actividad de “catering” que precisaría de su legalización expresa como tal.

- El desarrollo de estas operaciones no conllevaría la modificación o alteración de la configuración espacial y de las instalaciones recogidas en la documentación técnica adjunta a las correspondientes licencias, calificaciones ambientales o declaraciones responsables.

- Aunque, dada la forma de funcionamiento descrita, no sería previsible que ocurriese, en ningún caso podría aumentarse el aforo autorizado; por el contrario, las operaciones de entrega deberían organizarse de manera que el número de clientes en el establecimiento fuese tal que permitiese evitar aglomeraciones y que consumidores y empleados pudiesen mantener la distancia de seguridad establecida a fin de evitar posibles contagios por el COVID-19.

- En ningún caso podría ampliarse el horario marcado para la actividad de hostelería legalizada, pues en rigor, no nos encontramos ante legalizada una actividad comercial, sino de hostelería donde se permiten determinadas operaciones asimiladas a las de un comercio. Además, en establecimientos ubicados en zonas declaradas Acústicamente Saturadas, el horario de servicio debe restringirse al período comprendido entre las 8:00 y las 22:00h.

- Se mantiene la prohibición de entrega o servicio a domicilio de bebidas alcohólicas durante el horario comprendido entre las 22:00 y las 8:00 h del día siguiente y la prohibición general, en cualquier horario, de la venta de alcohol a menores, establecida en la norma citada.

- La actividad de entrega al consumidor final debe realizarse en el interior del local y no en la vía o espacios públicos, quedando vedadas soluciones como la disposición de mostradores en fachada, venta a través de ventanas o escaparates, etc.

- Tanto la clientela como los trabajadores deberán adoptar las medidas higiénico-sanitarias aplicables a las actividades de comercio minorista de alimentación, necesarias para evitar el contagio de la pandemia de COVID-19.

Los establecimientos afectados

La orden emitida afecta a los establecimientos de hostelería sin música y con música, que se refiere especialmente a restaurantes, autoservicios, bares, cafeterías y bares-quiosco, así como a pubs y bares con música.

Las actividades incluidas en el apartado 4 de este informe, legalizadas como actividades de hostelería, podrán desarrollar, sin trámite adicional alguno, la actividad de recogida “in situ” (previo encargo) o servicio a domicilio, de alimentos y bebidas.

En caso de no ajustarse a tales condiciones, el establecimiento debería contar de legalización expresa para poder realizar estas actividades, adicionalmente a la que dispongan como establecimientos de hostelería.