Las lesiones se están cebando con el Real Oviedo en este arranque de temporada. Aunque si hay una posición donde la situación se torna en dramática es, sin lugar a dudas, la de lateral derecho. En el primer encuentro liguero, Lucas Ahijado sufrió un grave esguince que aceleró la entrada de Mario Hernández en los planes de Álvaro Cervera. Este viernes el club confirmó que el lateral madrileño se perderá toda la temporada tras romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en una acción fortuita durante un entrenamiento.
El reglamento permite que, al tratarse de una excepción, el Real Oviedo pueda acudir al mercado de jugadores libres para poder cubrir esta baja. Con Viti y Oier Luengo como posibles parches, a la dirección deportiva carbayona no le va a quedar otra posibilidad que acudir a ello para poder fortalecer la plantilla en defensa, tal y como ha dejado caer Álvaro Cervera en rueda de prensa.
Mucho se ha escrito ya sobre los jugadores que todavía no tienen equipo. Destacan David de Gea, Eden Hazard o Jesse Lingard por encima de todos, aunque también hay nombres notables de jugadores con cierta trayectoria que siguen entrenándose en solitario a expensas de encontrar un nuevo destino.
Obviamente, el Real Oviedo no puede acceder a ninguno de esos jugadores y todo hace indicar en que concentrarán sus esfuerzos en firmar a otro lateral derecho. Lo más normal sería intentar pescar en el mercado nacional para que la adaptación sea lo más rápida posible y que Cervera pueda contar con él cuanto antes... Pero se antoja bastante imposible.
Tan solo hay tres jugadores españoles que podrían entrar en los parámetros que busca el Real Oviedo para reforzar el carril diestro. Uno de ellos es Juanfran Moreno -cuyo regreso se puede dar por descartado-, el ex del Sporting Jordi Calavera y Aleix Vidal, que por caché sería la opción más complicada dentro de las posibles. Aunque ha desarrollado su carrera en Marruecos y Holanda, también podría entrar en la terna Guillem Rodríguez, cuya última experiencia ha sido en el Ado den Haag.
Así las cosas, todo hace indicar que la dirección deportiva deberá mirar fuera de nuestras fronteras para poder encontrar un refuerzo de garantías. Aunque, a decir verdad, el panorama tampoco es que sea mucho más prometedor.
El nombre más conocido podría ser el de Diogo Figueiras, ex del Sevilla y que jugó en el Olympiacos la pasada temporada. También hay varias opciones en el fútbol mexicano, pero las dos fichas de extracomunitario ya están cubiertas.