Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada (recopilan datos sobre tus gustos y perfil).

Si continúas navegando por el sitio, estás aceptando su uso.

Puedes rechazar la utilización de cookies u obtener más información al respecto en nuestra Política de Cookies

A través de cualquiera de las páginas webs del Grupo tiene la opción de personalizar las cookies tal y como desee.

Es Noticia

El reencuentro de Montiel con sus orígenes

Gonzalo Montiel, antes del partido de entrenamiento ante River Plate (Foto: River).
ElDesmarque

El Sevilla FC cuenta con siete internacionales dando vueltas por el mundo, después de los regresos de Bryan Gil y Pape Gueye, la cifra inicial de nueve se ha reducido en dos, de manera que los que están más lejos de la capital hispalense son Gonzalo Montiel y Marcos Acuña, que se encuentran con Argentina en su país, siguiendo de celebración tras el campeonato del mundo logrado hace dos meses.

Durante la concentración, a la que no ha acudido el Papu Gómez por su lesión, el lateral derecho sevillista ha vivido un momento emotivo, ya que se ha reencontrado con el que fue su equipo y del que salió como un ídolo para fichar por el conjunto sevillista en el verano de 2021.

Este sábado, la Albiceleste se enfrentó en un partidillo de entrenamiento a River Plate en el predio de Ezeiza, la sede de la selección, que apenas dista poco más de tres kilómetros de la del equipo millonario. Fue un enfrentamiento de dos tiempos de 30 minutos, en el que Montiel salió como titular. El equipo de Lionel Scaloni salió con Gerónimo Rulli; Gonzalo Montiel, Germán Pezzella, Lisandro Martínez, Marcos Acuña; Giovani Lo Celso, Guido Rodríguez, Exequiel Palacios; Nicolás Gónzalez, Giovanni Simeone y Paulo Dybala. El otro sevillista, Acuña, que sí jugó ante el conjunto caribeño dos días antes, también disputó media hora.

Gonzalo Montiel, antes del partido de entrenamiento ante River Plate (Foto: River).

Supuso el reencuentro de Montiel con River Plate, el equipo en el que se formó y del que se marchó con 140 partidos y seis goles repartidos en cuatro temporadas. Fue un ídolo en el Monumental, y también lo es ahora en toda Argentina tras marcar el penalti definitivo en la final ante Francia, que hizo a su país campeón del mundo por tercera vez.

El partido de entrenamiento, por cierto, acabó con un contundente 4-1 en favor de la selección, con dos goles del colchonero Ángel Correa, otro más de Paulo Dybala y el último de Nicolás González. Matías Suárez marcó el gol del honor de River Plate.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar