Es Noticia
Champions League
Chelsea
Jornada 1
0-0
20/10/2020 21:00
Sevilla

Un Sevilla talla Champions

Expandir v

No había demasiadas dudas, la verdad, pero por si acaso, el Sevilla ha dado una enorme talla en Stamford Bridge ante el Chelsea y ha demostrado que es uno de esos equipos que no vienen de invitados a la Liga de Campeones, sino que llegan a agitarla, a disfrutarla y a pelear cada partido. Ante el equipo londinense, el conjunto de Lopetegui hizo un partidazo. En defensa y en el centro del campo, de un nivel de hecho excelente, tanto que prácticamente secó a un conjunto cuyo máximo potencial es el ofensivo, con jugadores como Havertz o Werner en nómina, en cuantiosa nómina además. El equipo de Lopetegui trabajó de manera magnífica, solidaria, sacrificada, y si algún equipo mereció vencer en el barrio de Chelsea, ese fue el Sevilla. Faltó algo de definición, de profundidad y último pase para dar el zarpazo definitivo, pero aún así tuvo ocasiones para haber ganado el partido, y lo habría hecho con todo merecimiento.

El partidazo del Sevilla se cimentó en un trabajo defensivo de muy alto nivel, altísimo. Y no solo de los defensas, y eso que Diego Carlos, Sergi, luego Fernando, Navas anduvieron casi impecables. En el centro del campo Rakitic, Gudelj, portentoso, y luego Jordán estuvieron también a gran nivel. Y arriba sin balón como siempre se exprimieron los atacantes. Eso permitió al Sevilla, con un alto ritmo de partido, achicando espacios, ahogar al Chelsea, que se quitaba la pelota de encima y permitía recuperarla a los de Lopetegui. La posesión en la primera mitad fue superior al 60% (acabó en 57%), y casi siempre en campo contrario.

Y con la pelota el Sevilla la realidad es que lo hacía bien. Rakitic dio una lección de lectura de partido, acercándose en corto cuando debía, ocupando los espacios a la perfección, Fernando, hasta la lesión de Gómez, igual, y luego Acuña más que Navas en la primera parte, Navas más en la segunda que Acuña, daban soluciones y opciones de continuidad de juego. Movía la pelota con inteligencia el conjunto hispalense, pero faltaba un puntito, un desequilibrio individual, y ahí Suso y Ocampos estuvieron bastante flojos. No desnivelaron la balanza, ni en uno contra uno ni con espacios, y aislaron a De Jong, que prácticamente no recibió ni una pelota en zona de remate. Eso sí, de espaldas y peleando, de diez.

Por esa falta de chispa o claridad el Sevilla no materializó en goles u ocasiones esa superioridad. Y la segunda parte, en el inicio, se acordarían los sevillistas de esa falta de definición o de una mano de Mendy en un remate de Gudlej, porque tuvo cierto arresto el Chelsea en el que dominó el partido y llegó en varias ocasiones, sin demasiado peligro. Pero de nuevo el Sevilla retomó el mando. Jordán completó 45 minutos fabulosos, y la entrada de Óliver por Suso calmó el juego sevillista hasta llevarlo al punto debido. De nuevo fue superior el equipo de Lopetegui, y el mismo Jordán en una volea pudo marcar en un córner. Se fue por muy poco.

El Sevilla terminó el partido en el área rival, buscando el gol, presionando arriba, como desde el minuto inicial, y peleando de tú a tú, o más, ante el Chelsea. No hacía falta decirlo porque ya se lo había ganado, pero este Sevilla es de Champions, tiene esa talla, esa dimensión, y en Stamford Bridge volvió a demostrarlo. Y si alguien mereció ganar, ese equipo fue el blanco.

Escribir comentario 1 comentario
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar

  1. FRAJORBE

    Totalmente de acuerdo con el artículo. Ha faltado el gol para poner la guinda a un señor partido, a una lección de fútbol. Ya no es casualidad, no es una racha, ha sacado sobresaliente en las revalidas que ha tenido antes de llegar a Champions (Roma, Manchester, Inter y Bayern). Me tiene ilusionado igual que cuando ganamos la primera Europa League, hasta el punto que si sigue en esta línea y tenga fondo de armario con lo que ha llegado,puede dar la campanada. El Sevillismo sabe mucho de soñar, y sabe que algunas veces, los sueños se cumplen.