El Molinón puso la emoción
Un baño de masas gracias a Quini. El tributo al eterno goleador y la popularidad de los futbolistas de la selección española dieron color y, sobre todo, temperatura a la previa del partido. Desde las 18.45 horas miles de aficionados esperaban la llegada de los jugadores españoles, todos ellos aclamados y con Sergio Ramos a la cabeza.
En las gradas, poco a poco, los 23.644 espectadores, según el dato oficial, se lo pasaron todo lo bien que pudieron. Recordaron y se emocionaron con el emotivo vídeo sobre El Brujo, que dio pie al partido, además de una gran pancarta con la imagen del goleador vistiendo la camiseta de la selección nacional.
Al inicio del partido, en el minuto tres, las gradas ya estaban haciendo la ola. Se lo pasaba en grande, sin sufrimiento alguno y con la única intención de disfrutar de los futbolistas de la selección. El tempranero gol generó las expectativas de una goleada que se hizo esperar. Tanto que no llegó. Los seguidores, como la selección, se despertó de la siesta con la única llegada de Islas Feroe en la primera parte. Estaba frío el encuentro, como la noche en Gijón, por lo que cualquier cosa era bienvenida para mantener el ánimo. Ahí entro ‘Manolo el del Bombo’, haciendo fotos en las gradas y centrando buena parte de las miradas. Incluso, a él se acercaron, en el descanso, varios aficionados de las Islas Feroe.
A pesar de las ocasiones y el tempranero gol de Rodrigo, su segundo, a El Molinón le fue entrando el sueño. Fue un fin de semana intenso, de fiesta este domingo por el día de Asturias y al final... largo. Mereció la pena para la afición asturiana, volcada con España y fiel a su leyenda Quini.
El Brujo estaría orgulloso.