Terror al ‘Barça Gate’: es el primero en decir a Joan Laporta que no viene al Camp Nou

El ‘Barça Gate’ se ha convertido en uno de los mayores escándalos que se recuerdan recientemente, y en toda la historia del futbol español. Porque a medida que avanzan las investigaciones, se van detallando informes cada vez más macabros y que dejan a la institución en una situación realmente compleja. Hasta el punto de que ya se ha hablado de la posibilidad de que sean excluidos de la próxima edición de la Champions League.

Por ahora, no hay ninguna sanción sobre la mesa, y Joan Laporta intenta transmitir calma y serenidad a los socios. Pero es evidente que la preocupación y el temor están presentes, sobre todo, si a eso le sumamos la complicada situación económica que atraviesan desde hace unos años. Sin duda, quedar excluidos de competiciones europeas supondría un duro traspié, y del que costaría mucho reponerse, por la pérdida de ingresos que esto implicaría.

Y, además, también se traduciría en la venta forzada de la gran mayoría de estrellas de la plantilla. De momento, trabajan sin normalidad, a la espera de que se conozcan más noticias, pero ya se ha filtrado que hay una cantidad considerable de jugadores que empiezan a pensarse mejor eso de aterrizar en el Camp Nou, y pueden optar por aceptar otras ofertas donde sí le garanticen un proyecto con estabilidad y sin problemas legales.

Ese puede ser el caso de Fabricio Díaz, una de las joyas que se habían colado en los planes del Barça. Durante el Mundial sub 20 que se disputó hace un mes le realizaron un seguimiento exhaustivo y continuado, y quedaron impresionados con las habilidades del centrocampista uruguayo, que fue una de las figuras de su selección, junto a Álvaro Rodríguez, la perla del Real Madrid. Milita en Liverpool de Montevideo, y tiene apenas 20 años.

Laporta estaba tanteando esta incorporación, sin embargo, el futbolista ha declinado la propuesta, y apunta a marcharse a River Plate o a Flamengo. En La Liga Santander, Villarreal y Girona también se han posicionado para acoger al crack ‘charrúa’.