Las renovaciones de Soler y Gayà, cuestión de Estado: así están

Carlos Soler y Gayà son los dos grandes referentes en el Valencia CF y ganan en importancia con mayor protagonismo e influencia en la selección española con actuaciones como la de este domingo ante Georgia. El valencianismo se encomienda a sus dos capitanes, los mismos que han puesto todo de su parte para permanecer en el Valencia cuando las cosas se han puesto peores, demostrando su compromiso y su amor por los colores blanquinegros del Valencia CF. Por eso mismo y por todo lo que representan, los aficionados del Valencia CF no entiendes su club sin las figuras tanto de Carlos Soler como de José Luis Gayà, razón por la cual, los asuntos de sus renovaciones pendientes, se convierten en capitales. Ambos finalizan su contrato en 2023 y el club de Mestalla debe hacer todo lo posible por conseguir alargar sus contratos.

La renovación pendiente de Gayà ya ha escrito varios capítulos. Ante la situación de zozobra que ha sufrido el Valencia CF durante los últimos meses, todo había quedado en stand by y con más de una temporada por delante, al capitán valencianista no le corría prisa abordar esa cuestión. Tranquilidad absoluta por parte de un futbolista cuya cláusula de rescisión asciende a 100 millones de euros. El Valencia CF, por su parte, siempre ha estado expectante ante cualquier posibilidad externa que le surgiese a Gayà desde fuera, sin embargo, siempre se ha cogido al rebufo de la voluntad del jugador, que incluso ha manifestado públicamente su interés de seguir en el Valencia durante mucho tiempo.

Soler y Gayà

Carlos Soler, con contrato hasta 2023 y una cláusula de 150 millones desde su último alargue de contrato también quiere quedarse en el Valencia durante un largo tiempo pero eso no es óbice para que el club haga todo lo posible por blindar, todavía más, si cabe a su '10'. Precisamente, la entrega del dorsal emblemático también es una muestra más de la importancia y de la ascendencia que ha alcanzado Soler tanto en el equipo como en el club valencianista. Algo que tan sólo permite una simple reflexión y todo un trabajo previo en los despachos para que Soler siga siendo un símbolo durante muchas temporadas más.