No ha sido, ni mucho menos, un encuentro sencillo para el Sevilla ante el CD Extremadura. El conjunto dirigido por Matías Almeyda consiguió vencer (1-2) a un rival teóricamente inferior, pero lo hizo con mucho sufrimiento, con una imagen bastante mala y una sensación de desconexión enorme. Para muestra, la tremenda bronca que Alexis Sánchez tuvo que darle a Kike Salas justo tras el primer gol.
Lo que debería ser motivo de celebración, un tanto, fue en el Sevilla un punto de charla. Alfon anotó a placer el primero de la noche y ni el ex del Celta celebró la acción de primeras (lo hizo en una posición dudosa). Los jugadores se iban reuniendo, pero Alexis Sánchez acudía a la zona muy enfadado.
Tras charlar brevemente con Alfon, el chileno agarró a Kike Salas -que no realizó un buen encuentro- y empezó a señalarle diferentes acciones.
Aunque el '4' intentó defenderse de primeras, acabó agachando la cabeza y escuchando todas las indicaciones, muy enfadado, que Alexis Sánchez le daba tras un inicio muy malo, tanto en lo personal, como en lo grupal.
Kike Salas, sin embargo, no fue el único que tuvo que escuchar a Alexis, ya que, tras el segundo tanto, el ex del Inter se fue en busca de José Ángel Carmona, que también tuvo que escuchar varias correciones.
La realidad es que ni el propio Alexis Sánchez firmó un buen encuentro -pidió perdón repetidas veces-, pero al menos sí puso compromiso e implicación en un equipo que sigue cometiendo errores groseros y que ya sufre hasta en la Copa ante un rival muy inferior.