La autocrítica de Dmitrovic: “Si no convertimos las palabras en hechos pasa lo que pasa”

El Sevilla FC vive uno de sus momentos más difíciles de los últimos tiempos. Eliminado completamente de la competición europea, con los mismos puntos que los equipos que están en los puestos de descenso, y con dos entrenadores pasados por la guillotina, la temporada se ha tornado desesperante y parece que todo lo que puede salir mal, sale peor. La autocrítica es moneda común entre los jugadores tras cada derrota, pero Marko Dmitrovic ha ido más allá.

El portero serbio, que el sábado encajó tres goles ante el Getafe -dos de ellos de penalti-, expresó sus sensaciones, malas, en la zona mixta del Sánchez-Pizjuán tras una nueva derrota que se ha llevado por delante a Diego Alonso, destituido como entrenador del Sevilla tras una racha nefasta de resultados. “Mal, mal, mal. Dolidos, tocados. Te gana el Getafe 0-3 en casa, imperdonable. Te da una lección de cómo se compite en esta Liga, cómo se juega. Cabeza abajo, pero el fútbol sigue adelante. Entendemos el enfado de toda la gente, pero en tres días tenemos otro partido. Primero, nosotros estamos cansados de repetir que hay que seguir adelante, pero si no convertimos palabras en hechos pasa lo que pasa. Dolidos, una de las peores derrotas, el día más tocado de la temporada, pero la única vía que tenemos es seguir jugando y tratar de ganar el martes”.

Dmitrovic también exculpó a su manera a Diego Alonso de lo sucedido en estos últimos meses. “El míster llegó después de varias jornadas y es menos culpable, pero entendemos que en el fútbol y todos los deportes los resultados mandan. Hubo una mejora que no se reflejaba en los resultados. Otro míster va a venir mañana, pero los responsables primeros somos nosotros. Hemos hecho autocritica en vestuario y lo sabemos, pero si no ganamos partidos no sirve de nada”, avisó.

“Triste, tocado, le deseo toda la suerte del mundo. El menos culpable, intentaba dar el máximo. No hay nadie que pueda criticarme más a mí que yo mismo, y no me queda otra que seguir trabajando. Somos responsables y no nos queda otra”, culminó el serbio con un mensaje de despedida al que ya es su exentrenador.