Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada (recopilan datos sobre tus gustos y perfil).

Si continúas navegando por el sitio, estás aceptando su uso.

Puedes rechazar la utilización de cookies u obtener más información al respecto en nuestra Política de Cookies

A través de cualquiera de las páginas webs del Grupo tiene la opción de personalizar las cookies tal y como desee.

Es Noticia

El no agarrón de Acuña sobre Radoja que acabó en penalti

Expandir v

El Sevilla FC se llevó el partido ante el Levante UD pero no lo hizo sin sufrimiento. De hecho, el equipo hispalense vio como le pitaron dos penaltis, ambos muy dudosos. En el caso de la segunda pena máxima, Acuña fue el protagonista.

El futbolista del Sevilla perdió la concentración en defensa y Radoja le robó la cartera. Ahí, Acuña hizo el amago de agarrar del brazo al serbio pero nunca llegó a hacerlo. Se le resbaló y no hubo agarrón. Mientras ese contacto se produjo, Radoja iba al suelo y el árbitro señalaba penalti.

Acuña se quejaba amargamente e incluso vio hasta la amarilla. Sin embargo, no había marcha atrás. Al final, Morales falló el penalti y el Sevilla tuvo ese alivio. Viendo repetida la acción, el agarrón, si lo hay, es muy leve.

En la parte superior de la noticia puedes ver el vídeo.

Escribir comentario 2 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar

  1. 17 años sin ganar NADA

    Ya es descarado como nos roban pero ni los arbitros, ni el VAR, ni Rubiales y ni Pique podrá con nosotros, a por la 2ª plaza VIVA EL SEVILLA

  2. Mayule

    Este hombre no es muy fino a la hora de hacer faltas. Es demasiado canchero. Estoy de acuerdo en lo riguroso del penalty pero esto no quita para criticar el juego de Acuña el cual no anda fino y su bajón físico tiene mucho que ver. Como el de toda la plantilla que da la sensación de estar quemada y, sobre todo, muy nerviosa y desquiciada. Todo esto sólo tiene un culpable: Lopetegui.