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Tirando de la manta

Á. R.

En apenas cuatro partidos oficiales, el Sevilla ya está dando buenas muestras de lo que es el equipo a día de hoy. Lo reconoce el propio Unai Emery y no hay más que repasar un poco el partido ante el Slask del pasado jueves para apreciar los puntos fuertes y los débiles de este equipo. El variado y potente ataque y la débil y desguarnecida defensa.

De momento, van una de arena y otra de cal en los dos encuentros más exigentes, ante el Atlético de Madrid y ante el Slask Wroclaw. Los dos con sus matices, pues el equipo colchonero está más hecho y es de los más potentes de la Liga y el conjunto polaco, aunque con argumentos, también tiene carencias defensivas. Por eso viene tan bien este domingo el partido ante el Levante, porque es un rival de un nivel medio, muy generalizado en la Liga, que puede marcar y validar o debilitar la teoría que maneja de momento el Sevilla para sus partidos, esa de que por poderoso en ataque marca más y tiene más oportunidades que el rival, con lo que se anula o relativiza la debilidad defensiva, evidente a la vez.
Es la teoría de la manta tan famosa y difundida en el fútbol. Si tapas la parte trasera apenas llega para el ataque y viceversa. De momento, defiende Emery, con gran parte de razón, que mientras se mejora en defensa el equipo hace ocasiones. De hecho hace muchas, y de orígenes variados. Además, en ataque tiene su gran baluarte, a día de hoy. Marko Marin. Pero no será el único, seguro. Sin ir más lejos ya se debate el técnico en su elección para encuentros como el día de hoy en su parte ofensiva. Bacca o Gameiro, Vitolo, Perotti, Rabello, adelantar a Rakitic... y dejando incluso a Jairo fuera de la lista.
Donde más problemas tiene es en la defensa, con pocos repuestos por ahora y figuras clave lejos del nivel de la pasada temporada, caso de Fazio. Pero no solo es la línea de cuatro de atrás la que tiene que aplicarse, es todo el equipo, y también el centro del campo, empezando con un Kondogbia que anda distraído por los cantos de sirena, quién sabe, y que vive por ahora más de su futuro que de su presente, pues su inicio de temporada con el Sevilla está siendo bastante irregular, dolores estomacales al margen.
Pero, afortunadamente, el partido tiene más condimentos. Uno muy emocional, el regreso de Iborra, granota de por vida, a su estadio para enfrentarse a su exequipo. Ya ha demostrado el nuevo jugador sevillista tener querencia por su exequipo, lógicamente. También en el banquillo rival estará otro sevillista confeso, Caparrós, que en cualquier caso tiene casi la obligación de amargar a su exequipo tras el 7-0 de la primera jornada en Barcelona. Lo que no existirá es la posibilidad de que el exsevillista Babá, recién llegado, juegue ante su club propietario. No ha entrado en la lista.
Más allá de todas estas teorías, además, el Sevilla necesita arrancar ya sumando puntos. No ya por incertidumbres clasificatorias, inexistentes en la segunda jornada, sino por el respaldo y la confianza que todo proyecto debe adquirir, y que solo se logra rellenando las casillas.
 
Alineaciones probables: 

Levante UD: K. Navas; Pedro López, Vyntra, David Navarro, Juanfran; Simao, Adoua, Xumetra; Ángel, Rubén García, Barral.
Suplentes probables: Javi Jiménez; Nikos, Rodas, Sergio, Jason, Ivanschitz, Pedro Ríos. 

Sevilla FC: Beto; Coke, Fazio, Cala, Alberto Moreno; Kondogbia, Iborra; Vitolo, Rakitic, Marin; Carlos Bacca.
Suplentes: Javi Varas; Fernando Navarro, Diogo Figueiras, Cristóforo, Rabello, Perotti, Gameiro.

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