La UEFA y sus razones para acabar con los fondos de inversión
De sobra conocida es, por ejemplo, la relación entre el Sevilla y Doyen Sports, que ha conducido hasta Nervión a jugadores como Babá, Botía, Kondogbia y Stevanovic.
Pues bien, la UEFA ha vuelto a insistir en este asunto. Lo ha hecho por medio de un artículo en el que su secretario general, Gianni Infantino, expone las razones del máximo organismo del fútbol europeo para acabar con la copropiedad de futbolistas. Los motivos esgrimidos son estos:
1) Supone un dilema ético y moral. ¿Es apropiado que una tercera parte implicada tenga los derechos económicos sobre otro ser humano y que comercie con ese 'activo'? Esto sería algo inaceptable en la sociedad, y no tiene cabida en el fútbol. Los futbolistas (al igual que cualquier otra persona) deberían tener derecho para decidir su propio futuro.
2) Debemos proteger la integridad de las competiciones deportivas. ¿Qué ocurre cuando la misma corporación posee los derechos económicos de varios jugadores de distintos equipos? Hay un claro riesgo de conflicto de intereses. El riesgo de una manipulación de los resultados es algo con lo que la UEFA tiene que luchar, ahora más que nunca.
3) El modelo de negocio de los que participan en la propiedad compartida de jugadores se basa en cambiar de club a los jugadores con frecuencia. Dicho sin rodeos, más traspasos significa más dinero para los titulares de los derechos, lo que resulta en inestabilidad contractual y a largo plazo que los ingresos salgan del ámbito de este deporte.
4) Esta práctica es claramente incompatible con la filosofía económica y deportiva del juego limpio financiero, que consiste en garantizar que los clubes puedan vivir dentro de sus posibilidades. Los clubes no deben depender de las inversiones de terceros para adquirir jugadores que no pueden permitirse por sí mismos. A largo plazo, esto no es bueno ni para el club ni para el jugador. Las soluciones a corto plazo entran en conflicto con las normas y los principios del juego limpio financiero.
La UEFA ha solicitado a la FIFA que tome medidas para prohibir estos fondos a nivel mundial. No obstante, el organismo presidido por Michel Platini está decidido a poner fin a este tipo de actividad independientemente de lo que haga la FIFA, mostrándose a favor, si es necesario, de introducir medidas transitorias y un periodo de adaptación para que los clubes vayan abandonando esta práctica.