Javi Moyano, un sueño cumplido y una vida experimentada
Javi Moyano es muy agradecido. Tras forjar su carrera deportiva en Segunda división B, con nueve temporadas, cinco equipos y 269 partidos de bronce, el capitán blanquivioleta valora mucho poder vivir su segunda temporada en LaLiga Santander y ser uno de los líderes deportivos de un Real Valladolid que vive uno de los mejores momentos de su historia reciente.
Con ello, el '17', con contrato hasta este próximo verano, disfruta cada día que vive en el vestuario del Nuevo Estadio José Zorrilla y cada experiencia que adquiere en su etapa blanquivioleta.
Recordando cómo fueron sus inicios y el esfuerzo que tuvo que hacer su familia y, sobre todo, su padre para que sea lo que es ahora, Javi Moyano sigue disfrutando de su carrera futbolística y de todas las opciones y oportunidades que ésta le deja en el camino.
El capitán es una persona que se arraiga con fuerza a la tierra en la que vive. En 2015, cuando llegó a Zorrilla, el jienense dejó atrás una etapa muy importante de su vida. El paso por el Club Deportivo Tenerife no le dejó sólo su estreno en LaLiga SmartBank, sino, también, la unión con el pueblo canario.
El poso canario
Amigo personal de Marcos Ledesma, campeón de lucha canaria y una institución en este deporte, Moyano se hizo un gran asiduo a estos combates junto con Roberto Perera, actual segundo entrenador del Cádiz CF. Arraigado a las costumbres canarias, el futbolista tuvo dificultades para tomar la decisión que, más tarde, cambiaría su vida deportiva.
Llegar al Pucela no fue sencillo y continuar en él nunca fue tan fácil como lo parece ahora. Valorando en algún momento, incluso, su salida, el capitán se ha hecho fuerte ante las muchas adversidades que se ha encontrado. En las últimas semanas ha confirmado su buen momento, pero, en otras fases, no ha escondido estar mal.
Reconociendo su bajones de rendimiento y contestando ante las críticas, el capitán del Real Valladolid ha mostrado su personalidad. No se esconde porque no debe hacerlo. En un deporte donde el sacrificio es tan determinante, Moyano y su familia lo tuvieron. "Mi padre pasaba 10 o 12 horas en el camión y cuando salía me llevaba a entrenar", confesó en marzo a un grupo de padres de jóvenes jugadores del Club.
Javi Moyano cumplió el sueño de debutar en Primera con 32 años, cinco meses y 25 días
Él apostó por ser jugador y su familia le apoyó en ello. No dudó en trabajar por su sueño y, a la vez, aprovechar las oportunidades que esta carrera deportiva le ofreció. Conocer Almería, disfrutar de jugar en su Jaén natal, arraigarse a Santa Cruz de Tenerife o Valladolid e, incluso, disfrutar de sus experiencias en Lanzarote y Melilla.
Un debut con más de 32 años
La carrera de Javi Moyano está marcada por el cumplimiento del sueño de jugar en LaLiga Santander, pero, también, por la mochila llena de experiencias, alegrías y amistades que se ha llevado hasta ese 17 de agosto de 2018 cuando, en el Estadio de Montilivi, debutó en la élite del fútbol español con 32 años, cinco meses y 25 días.
Dicen que lo importante no es conseguir tu objetivo, sino el trabajo, los premios y las experiencias que te llevas hasta llegar a él y Javi Moyano lo ha hecho. Llegó a ese debut y a los 100 partidos como pucelano como capitán del Real Valladolid por ser un "currante", como él asegura.
Todo ello se produjo tras firmar un ascenso a Primera división que colmó muchas de las expectativas e ilusiones de aquel momento. Ahora, en su segundo año en la élite, su ilusión ha evolucionado, pero su agradecimiento sigue siendo el mismo porque él no olvida de dónde viene ni cómo ha llegado hasta el punto actual.