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"Es una vergüenza, pero estamos preparados para esto"

Akeksander Isak, durante un partido con la absoluta de Suecia.
Periodista. Apasionado del deporte.

El delantero de la Real Sociedad Alexander Isak fue triste protagonista durante el partido de Suecia ante Rumanía en Bucarest. El delantero fue víctima de supuestos insultos racistas durante el encuentro, por lo que el árbitro se vio obligado a pararlo. Tras el duelo, Isak comparecía ante los medios dolido por lo sucedido. "Es una vergüenza, pero estamos preparados para esto, obviamente duele".

Todo sucedió en el Rumanía-Suecia que se disputaba en Bucarest. El delantero de la Real Isak fue increpado con supuestos insultos racistas desde la grada. El jugador avisó al árbitro y este paró el encuentro durante varios minutos, mientras avisaban por megafonía de lo que estaba sucediendo.

Se trataba de un nuevo caso de racismo en los campos de fútbol. Tras el encuentro, Isak mostraba su indignación por lo ocurrido. "Oí los gritos racistas que venían de la grada y avisé al árbitro, le dije que si no oía nada. Me dijo que no. Unos minutos después paró el partido. Me preguntó, hablamos y el partido continuó. Me parece bien, es una vergüenza, pero estamos preparados para esto, obviamente duele", confesó un dolido Isak.

La Real Sociedad, a través de sus redes sociales, aprovechó para enviar un mensaje contra el racismo.

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