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Es Noticia

Denzel Washington estaría orgulloso de Alarcón

Isco, celebrando su tanto ante el Valencia (Foto: RMCF).
Periodista especializado en Sevilla FC y Betis.

El Real Madrid estrenó la 'nueva' Supercopa de España con una contundente victoria ante un pálido, descafeinado e irreconocible Valencia. Toni Kroos arrancó el encuentro e Isco Alarcón, antes del descanso, dejó certificada la victoria. Luego, con una mágica acción, Modric cerraría el encuentro. Una historia de película con nombre 'colocado'.

Cuando el redactor preparaba el artículo buscaba nombres, detalles y peculiaridades para destacar. En dicho momento recordó que el Real Madrid, para llanto de algunos, no ganó nada el año pasado. Como el Atlético de Madrid, que fue subcampeón de LaLiga Santander, por cierto. Recordó que el conjunto de Zinedine Zidane se ha convertido en El Invitado de la competición y, sea por casualidad o destino, recordó una película de hace ya algunos años.

El pasado 2012, Daniel Espinosa, reconocido director de cine sueco, dirigió la película apodada en español como El Invitado. En dicha historia, el archiconocido Denzel Washington interpretaba a un exagente de la CIA que reaparecía tras diez años y, protegido por la agencia, sufría un ataque. No querría hacer más spoiler, pero le diría al lector que si viese a Isco Alarcón, si el actor le viese, bien estaría orgulloso de la 'réplica' a su papel.

Isco cabecea un balón a portería en el partido de la Supercopa (Foto: EFE).

El que fuese estrella de la famosa 'unidad B' del último Real Madrid campeón de LaLiga, desapareció. No durante diez años, pero sí durante algunos meses más. La llegada de Santiago Solari -y sus problemas de sobrepeso- no tuvo arreglo con la vuelta de Zidane pero, casi un año después, el invitado está de vuelta.

El malagueño dejó en Arabia Saudí muestras de un futbolista recuperado, de un chico que no ha olvidado su punch, de un jugador que guarda kilates en sus pies y, de paso, le dio la razón a Zinedine Zidane.

Porque el fútbol, como de costumbre, siempre da la razón: Zidane olvidó el 1-4-3-3, apostó por cinco hombres en el centro con Isco y el recital, no sólo del malagueño, fue increíble.

Sigan, sigan, El Invitado también quiere levantar la Supercopa de España.

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