La despedida más trágica de Buffon: del señorío inicial a las lágrimas finales

Se acabó. El adiós de Gianluigi Buffon de la selección italiana se ha hecho efectivo este lunes en San Siro en un partido trágico para Italia, que ha quedado eliminada del Mundial por primera vez en los últimos 60 años a manos de una Suecia a la que le bastó con mantener su solidez defensiva ante un conjunto, el de Ventura, con pocas ideas en ataque.

El partido para Buffon comenzó demostrando todo su señorío. Mientras sonaba el himno de Suecia en Giuseppe Meazza, miles de aficionados italianos pitaron sus acordes, a lo que el meta respondió con unos efusivos aplausos.

La noche para Italia sólo fue a peor, mostrándose incapaz de hacer al menos un gol que forzarse la prórroga. Nada más concluir el partido, Buffon volvió a dar una lección de deportividad y se recorrió gran parte del campo felicitando personalmente a los jugadores suecos, que celebraban por todo lo alto su clasificación para el Mundial.
Tras ello, el portero atendió a los medios sin poder evitar las lágrimas: "Acabar mi carrera era cuestión de tiempo, pero me da pena, me da mucha pena por mis compañeros y por esta afición", recalcó Buffon, que no dio demasiada importancia a su retirada de la selección.
Una leyenda del fútbol se despedía de la tetracampeona mundial, pero a él solo le preocupaban sus compañeros y su afición. Todo ello, después de haber aplaudido el himno rival y haber felicitado a los visitantes. Buffon se despide de la forma más triste posible de la selección, pero demostrando por qué tiene el cariño del mundo del fútbol.