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Un máster en 16 meses: el legado de Pellicer como técnico del Málaga

Pellicer, en un partido amistoso de la pasada pretemporada (Foto: Málaga CF).

En las despedidas siempre toca hacer balance y el de Pellicer, que este martes confirmó que no continuará en el Málaga CF la próxima temporada, deja una nota alta tras temporada y media como primer entrenador del cuadro blanquiazul. Tomó posesión de forma interina antes de un partido ante la Ponferradina y tras el 'Caso Víctor' -él mismo reconoció en alguna ocasión que se veía un par de partidos y poco más- con un fuego que apagar y, contra pronóstico, se convirtió en el bombero que el club necesitaba. Le ha tocado lidiar con una época convulsa a nivel institucional, con una pandemia, una plantilla con sólo 18 fichas profesionales, un ERE deportivo en mitad de una pretemporada o la escasa solvencia económica del club a la hora de abordar fichajes. De ahí se puede entender el desgaste que le ha llevado a poner punto y final a su etapa como entrenador del Málaga. Un camino lleno de curvas que ha sabido sortear para impedir en dos temporadas consecutivas un descenso que hubiera sido dantesco para la vida de la entidad.

Se va a marchar Pellicer siendo el sexto entrenador con más partidos en la historia del Málaga CF, superando en esta recta final de curso a Juande Ramos y quedando detrás únicamente de Tapia, Gracia, Pellegrini, Muñiz y Peiró. Tiene en su mano hacerlo, además, con más victorias que derrotas y la sensación de haber sido, y quizá en esta época haya sido más importante que la labor meramente técnica, un gran gestor de vestuario. Supo exprimir al Málaga que le tocó encontrarse y salvarlo tras un parón por el coronavirus que trastocó a todo el mundo. Antes, un gol de Adrián en los últimos minutos ante el Numancia impidieron que Shaheen, entonces brazo ejecutor de Al-Thani, le bajara el pulgar a Pellicer. Después llegó una gran victoria en el Carranza -y la salida del club del norteamericano- y Pellicer se ganó el derecho a seguir hasta final de curso.

Pellicer y Manolo Sánchez, en el Anexo (Foto: Málaga CF).

En su maleta también se lleva Pellicer el impulso que ha dado a varios jugadores de la cantera que han pasado a ser fundamentales. En su primer partido le dio la alternativa a Juande y desde entonces el cordobés ha sido uno de los futbolistas más utilizados por el de Nules. También Ismael Casas, cuya polivalencia ha sabido explotar Pellicer, un Ramón que pasó a ser este año clave en la medular del equipo o un Luis Muñoz que ha implementado hasta su capacidad goleadora han tenido un impacto importante en el Málaga del preparador castellonense. A ellos hay que sumar a Cristo, Hicham (cuando ha estado sano ha confiado en él) o Ale Benítez como futbolistas con recorrido en el primer equipo, además de otros que han debutado con los mayores a las órdenes de Pellicer. Este año, sin ir más lejos, siete canteranos han debutado en LaLiga SmartBank: Issa Fomba, Larrubia, Quintana, Loren, Haitam, Mini y el citado Ale Benítez.

Activos que en buena medida Pellicer, que ya los conocía de su paso por la cantera, ha revalorizado deportivamente y también en cuanto a su posible valor de mercado pensando en alguna venta futura. Se marcha siendo la misma persona de club que a su llegada, siendo una figura fundamental para haber digerido situaciones nada sencillas a todos los niveles. Lo del pasado verano, con una concentración de pretemporada en la que los jugadores del ERE se marchaban y los fichajes iban incorporándose, posiblemente la más difícil de todas. Ahora, su camino y el del Málaga se separan, lo hace sin haber tenido la recompensa emocional de volver a vivir una Rosaleda en ebullición.

Pellicer, saliendo del banquillo en La Rosaleda.

A falta de tres partidos su balance en 59 partidos de LaLiga SmartBank es el siguiente: 20 victorias, 20 empates y 19 derrotas. Además, dos rondas superadas en Copa del Rey ante Coruxo y Oviedo, con la posterior eliminación ante un Primera como el Granada. Pero, más allá de números, Pellicer se marcha dejando atrás una buena gestión de los recursos que ha tenido. Se subió a un barco con muchas fugas y, junto a su cuerpo técnico y el trabajo de la dirección deportiva, ha sabido tapiar cualquier opción de desastre. Salvar al equipo con el margen con el que lo ha hecho esta temporada es el mejor resumen de un trabajo incansable y que ha terminado por aflorar un desgaste que ha pesado más que nada para tomar la decisión de no continuar en el Málaga.

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