Duelo de jeques

Este sábado en La Rosaleda se da una circunstancia curiosa. Aunque no van a coincidir físicamente en el palco, el derbi andaluz será un derbi de jeques. El Málaga CF y el Almería están bajo el mandato de un dueño de esta procedencia, término que se utiliza entre los musulmanes y otros pueblos de Oriente Medio. Abdullah Bin Nasser Al-Thani y Turki Al-Sheikh tienen el bastón de mando en ambos clubes respectivamente, que se encuentran ahora en LaLiga Smartbank. Viven distintas etapas en sus gobiernos. La crispación en torno a la figura del primero contrasta con la ilusión de los primeros pasos del segundo.

El catarí se hizo cargo del conjunto de Martiricos en 2010, cuando compró la parte mayoritaria de las acciones a Fernando Sanz, que hablaba hace unas horas de la venta. Nueve años como propietario y presidente con luces y sombras. El Málaga bajo su influjo vivió su época dorada con la participación en la Champions League, pero ahora vive sus días más bajos. El fervor tornó en la crispación actual. Casualmente, hay convocada una concentración contra Al-Thani para una hora antes del partido y son varias las instituciones públicas que le han pedido un paso al lado. Entre medias, también tiene un litigio en marcha con BlueBay. Un mar de frentes para e jeque blanquiazul, uno de los grandes responsables del desalentador panorama.

Ilusión en Almería

El legado de Al-Sheikh en el Juegos de Mediterráneo se remonta a principios de agosto, cuando se hizo con el control del Almería por unos 20 millones de euros. Se cerró la era de Alfonso García, que presidía el club rojiblanco desde 2003. Un cambio de rumbo para una entidad que vive días de vino y rosas. Un aluvión de fichajes, incluido un cambio de entrenador en mitad de la pretemporada, para abrir una nueva etapa que desprende entusiasmo en la afición unionista.

Se está traduciendo en noticias positivas en el césped. Turki tiene 38 años, procede de Arabia Saudí, donde es un Asesor Real de la Corte del país, teniendo el rango de Ministro. También es presidente de la Autoridad General de Entretenimiento por Real decreto. Su fortuna está valorada en billones y anteriormente tenía la propiedad del Pyramids FC egipcio.